1, 2 y 3 Juega, crece y aprende a la vez.

Sobre Nosotros

1, 2 y 3, Juega crece y aprende a la vez:: reir, saltar, cantar, llorar, contar, jugar, ... /www.escuelainfantil12y3.com

Historia

En todo este tiempo, se han ido acumulando toda nuestra experiencia con los niños, todas nuestras vivencias, toda nuestra motivación, toda nuestra entrega en la labor de educar y ayudar a crecer a los niños que pasan por aquí.

Educamos de una manera VIVENCIAL e INTEGRAL, donde el niño es el protagonista de su estimulación, aprendiendo cada concepto mientras lo vive y experimenta por sí mismo. Y es que, hay cosas que a pesar de que pasen los años, vale la pena mantener, porque simplemente funcionan.

Seguimos considerando que crear un ambiente cálido y lleno de afecto es la base fundamental para su desarrollo completo, favoreciendo de esta manera, los aprendizajes vivenciales, que perduran para siempre.

Porque día a día, desde cada mañana hasta que volvemos a apagar las luces, cada rincón de la escuela se decora e ilumina con las risas y las ilusiones de los más pequeños, y, somos conscientes, de que ni en las mejores y más caras tiendas de diseño, encontraríamos una decoración más bella y emocionante, que aquella que elaboran los niños con sus propias manos, con sus propias e incansables ganas de aprender. Porque esa decoración, no puede pagarse con dinero, solo con amor. Con el amor que dedicamos cada día en el creciminto y evolución de los niños, teniendo en cuenta los gustos y las necesidades de cada uno de ellos.

Nuestras instalaciones también han ido evolucionando con el paso del tiempo. Con nuevos colores, nuevos espacios, nuevas tecnologías. Creando un entorno cada vez más moderno, pero a su vez manteniendo su ambiente familiar, acogedor y sencillo.

Con cada color que hemos usado, y cada vez que hemos trabajado por la escuela, nos hemos acordado de que lo más importante, son ellos, los niños, enseñarles a mirar, a aprender, a jugar, a curiosear, a vivir, a fijarse en la esencia de cada estímulo, en su sencillez, y no en los grandes lujos, para ser feliz y estar contento.

En nuestro patio, acompañados siempre por su gran sol, y rodeados por las verdes hojas, se han cantado las mejores canciones que se puedan oír, se han hecho los corros más grandes, han corrido los triciclos más veloces, y han sonado las risas más fuertes. Cada día, al oír la frase “¡AL PATIO!”, los niños se llenan de emoción, corren hacia la fila y manifiestan su impaciencia por salir y disfrutar como nunca.

Para nosotras, es esencial conocer a cada niño, e ir modelando a partir de sus características, peculiaridades, necesidades…, y nuestro principal premio es ver que, efectivamente, cuando llega el final de esta etapa, son “mucho más mayores”, y han aprendido, a partir de esos materiales que hemos ido elaborando entre todos, un sinfín de conceptos y de memorias, y un sinfín de valores.

Nos gusta invertir en el seguimiento de los niños, en observarlos de cerca, en colaborar con las familias, en realizar escuelas de padres, en informar y atender las dudas de los papás en cada momento.

Ante la competencia que va surgiendo, hemos seguido manteniendo convencidas, de nuestra cercanía con las familias.

Ahora, ya no nos cabe duda, porque seguimos viendo nuestro principal premio, cuando nos siguen visitando los niños, ya un poco más mayores, y, nos dicen “qué grande veía la escuela o que grande eras, seño”. Recuerdan aquel taller que hicimos entre todos, aquella anécdota, aquellas risas, nuestros juegos en el patio y el cariño que les cogimos. Y a veces nos dicen que han elegido nuestra misma profesión, “educación infantil”, por aquel granito de arena que dejamos en su infancia.

Entonces, es cuando respiramos tranquilas, con la sensación de una elección bien tomada y seguimos contentas con nuestra labor de educar a los niños y a las familias, caminar con ellos, acompañados por el valor de la sencillez, tan necesario en estos días que vivimos.

Porque para nosotras, y para los niños, lo importante es el ambiente y la experiencia. Así lo vamos viendo y comprobando año tras año.

No nos caben en ninguna caja las gracias que os queremos dar a todos los que habéis confiado en nosotras. A los que habéis mirado más allá. A los que creéis en los valores.

Simplemente y sencillamente, GRACIAS a los niños por crecer con nosotras año tras año.

Gema, Macrina, Eva, Sandra, Julia y Encarna.

El equipo educativo.