Reseñas
Local amplio con terraza. Calidad aceptable, servicio a mejorar. Pedimos en la barra, nos dicen que nos llevan el café/pastas a la mesa. Terminamos de consumir, y cuando vamos a pagar la camarera nos llama la atención porque no habíamos pagado antes. Cómo saber esto si no lo dicen? No será que se olvidó ella de cobrarnos?
A ver, el local está bien y es amplio, ademas dispone de una terraza también de buen tamaño. Tienen bastante variedad de producto. Lo que no me ha gustado es que no hablan inglés estando en el centro y sobretodo me ha parecido caro. Un bikini y una cocacola a casi 6€ es excesivo.
Cafetería bar. Fuimos a desayunar. Pedimos dos bocadillos de tortilla de bacon con queso, un zumo y una agua . El bocadillo no tenía mucho sabor a nada, y estaban frío. Costo 17€ . No creo que vuelvaComida: 2/5
Lugar amplio y muy limpio, la atención de las chicas un 10. Calidad precio buenísimo solo 3,40 bocadillo grande y café. Por supuesto que volveré. El bocadillo de atún estaba riquísimo y tenía mucha cantidad de atún.Comida: 5/5
Esperiencia más que excelente. El trato de las dos chicas que me han atendido hoy por la mañana ha sido genial, al igual que la calidad del producto y precio. Bocadillo caliente recién hecho con refresco en el centro de Barcelona por 3'40 es espectacular. Lugar tranquilo en el que apetece estar un buen rato.
Nos han cobrado 30 céntimos por dos hielos. También un suplemento de terraza cuando hemos tenido que ir a pedir dentro y traernos a la mesa nosotros mismos las bebidas. 30 minutos esperando, la chica ha venido a limpiar la mesa y no ha tenido la decencia de decir que no hay servicio a terraza por el cual nos han cobrado.
Una excelente atencion de parte las camareras. Pedimos unos bocadillos calientes y vendida .calidad y precio está muy bien, lo recomiendo al 100% repetiré sin duda alguna.
HORRIBLE. Te intimidan para que pagues, nosnquerian cobrar de más sin motivo aparente, las bravas…… TERRIBLES osea es que ni en las patatas congeladas saben tan MAL. Me sabe mal porque queriamos pasar buen rato y no pudomos tomar nada más que cerveza ya que no tienian ni pan para hacer un triste bocata… Enfin les pondria un 0 pero no dejan. De verdad, no vayais no vale para nada la pena. El trato un 0/10 y la calidad de todo un -12/10. No pensamos volver, y mira que no solemos ser gente que gaste poco en bares/restaurantes de la zona.
Y no le pongo un 0 porque no se puede. Cero recomendable, te trae latas de cerveza y te las cobra a 2,40€. Bravas con la salsa en paquete. Nada mas llegar nos hizo pagar la cuenta alegando que lo hacía con todas las mesas cuando nosotros al preguntar a otros clientes era mentira. Al reclamarle el porque nos empezo a hablar en su idioma, imagino que nos estaba insultando por pedirle explicaciones. Salio el marido y se sento a vigilarnos cuando ya pagamos la cuenta... HORRIBLE. Señor propietario, teniendo un 3,8 de 5 estrellas no creo que el 99% de sus clientes opinen lo contrario que yo, sin contar la cantidad de gente que no comentara su pésima atención aquí o los que son extranjeros y aceptaran este tipo de trato porque no tienen ganas de discutir. Como persona que trabaja de atención al publico le recomiendo que en vez de atacar al cliente, que le da una opinión para la mejoría de su establecimiento, lea atentamente y piense el porque recibe este tipo de comentarios “pésimos” como usted los hace llamar. Otra mesa de las 4 que tenia en terraza se fue super disgustada al igual que nuestra mesa. Por suerte yo ya conozco el tipo de trato que ofrecen y espero que mucha gente vea esta reseña y evite pisar su establecimiento para no pasar el mal rato que pasamos nosotras.
Fuimos 5 personas a tomar algo por la tarde, nos sirvieron la bebida caliente Ladrón de Manzanas y al pedirle dos vasos con hielo, la camarera entró y salió solo con 1, cuando le indicamos que eran 2, se puso a gritarnos y a decirnos textualmente que le habíamos hecho darse demasiados paseos, haciendo señas con las manos indicando el local y que no pensaba traernos otro vaso, que si lo queríamos fuéramos dentro a buscarlo. Una de nosotras fue dentro y le monto otro espectáculo. La situación fue ridícula, si no hubiera sido porque te obligan a pagar al segundo de sentarte en la mesa nos hubiéramos levantado. Por cierto uno de los vasos con hielo nos lo dio roto de cristal pero no hubo valor de decirselo, por si acaso se enfadaba de nuevo.