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Reseñas, información para Cafetería Restaurante Venta de Quicena

Cafetería Restaurante Venta de Quicena

Sobre Nosotros

BRASERIA Venta de Quicena.
Almuerzos, Comidas,Cenas,ESPECIALIDAD CARNES A LA BRASA,MENÚ DIARIO COMIDA CASERA.
Zona infantil, parking,terraza
TE ESPERAMOS

Dirección: Carretera de Barbastro, Km 3,5, 22192 Quicena, Aragon, Spain
Teléfono: 974245666
Ciudad: Quicena
Ruta: Carretera de Barbastro, Km 3,5
Código postal: 22192


Horas laborales

lunes: 08:00 - 18:00
martes: 08:57 - 18:00
miércoles: 08:00 - 18:00
jueves: 08:00 - 18:00
viernes: 08:00 - 18:00

Reseñas
Es la primera vez que venimos, pero dudo que repitamos. Servicio totalmente descoordinado y poco profesional. Dispone de terraza, pero es muy ruidosa, ya que da directamente a la carretera. La comida muy básica e insípida, la paella parecia un simple arroz hervido al que despues se le añaden un poco de sazonar, La tostada pan recalentado y dos anchoas tristes sobre una escalivada correcta, los macarrones correctos, al igual que el ternasco.
La comida muy buena, servicio rápido. Gracias.
Es un lugar correcto para comer por menú de 15 €. Ambiente agradable.
De vuelta de vacaciones, como todos los años, hemos vuelto a parar a comer hoy 8 de septiembre de 2017. Aunque recientemente han cambiado los dueños, la comida sigue siendo abundante y riquísima, y el precio es correcto. Además, aunque estaban a tope, no hemos tenido que esperar demasiado y el trato ha sido fenomenal a pesar de que estoy seguro de que estaban ya agotados, y muy cercano. Sin duda, volveremos a parar cuando pasemos por aquí.
Llegamos pasadas las 3 y no teníamos derecho a menú. Por lo visto tampoco a mesa. La comida estuvo muy rica, pero cara. Lo que no entiendo es porque no pudimos sentarnos habiendo mesas libres, tampoco otra familia que llegó después con Niños. A la siguiente familia les dijo, tras insistir, que esperasen a que nos fuéramos para que ellos con niños también, pudieran sentarse. Ya que nos había dicho q no a los demás. Creo que es muy fácil mejorar el trato a los clientes...
Fuimos a comer a mediodía un lunes, menú de precio considerable comparado con el servicio. La camarera te sirve como si te estuviera perdonando la vida, con muy poco tacto y educación. El menú incluye agua y vino y pedimos ambas cosas, la botella de vino sospechosamente abierta. ACONSEJO NO PEDIR VINO. Cuando estábamos tomando los postres vimos como rellenaban las botellas de vino del vino que quedaba de otros comensales. Una auténtica vergüenza!!!!!!
Hoy comimos aquí, junio del 2017. Mi pareja y yo pedimos todo diferente. El local fresquito y acogedor ya de entrada se agradecía. La atención de todo el personal lo mejor de todo y muy cercanos. La comida muy muy rica, bien presentada y abundante. Pan abundante. Los postres riquísimos y perfectos para mi gusto. La relación calidad/cantidad/precio inmejorable. Más estrellas les daría si pudiera! :-. Ya sólo con lo agradables y atentos q fueron, ya imaginamos lo rico q estaría todo! Muchas gracias! Lo recomendaremos siempre! Suerte con el nuevo local!!
Es un absoluto desastre, precio del menú el domingo: 24€ , los baños sucios y sin posibilidad de lavarse las manos sin jabón La comida mala de calidad y muy mal cocinada Una verdadera estafa. El servicio malo, los camareros no tienen la menor idea de atender al público. El dueño o responsable ausente, hubo mesas que ante tal desastre se levantaron y se fueron. Fecha del desastre-estafa de comida: domingo 27 de mayo 2018
Muy mala atención, por la hora que llegábamos ya sabíamos que no se iba a poder comer, pero ni un bocadillo. Después de nosotros, llegó otro chico que era un conocido les hicieron un bocadillo,y se lo cobraron. Zona infantil, pues no se si reírme, porque es una caseta de plástico que se cae a cachos y un tobogán de plástico, que mejor no subir al niño. Para entrar a aparcar, mejor ni entrar porque es una carretera de todo baches. Yo si que no volveré, y le informare a mis conocidos que ahí no paren
Este bar sigue abierto gracias a la cocinera/o porque por las camareras no creo. Increible el trato que nos han dado. Ya desde el primer momento con cara de perro para darnos una mesa. Nos hemos tenido que levatar a coger nosotros mismos la sal y el keptchu despues de esperar 10 minutos. Deberian de ir a clase de atencion al publico porque tela... ¡SONREIR QUE NO COBRAN!
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