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Reseñas, información para Cueva del Tío Serafín

"Grotte del Huecar está situado en un lugar privilegiado, en la ribera misma del río Huécar, en lo más bonito y visitado de Cuenca, a pocos metros de las Casas Colgadas, el Puente de San Pablo o el Teatro Auditorio. De hecho Grotte es una visita obligada más si quieres llevarte, de verdad, el mejor recuerdo de Cuenca, pues estamos en el interior de una cueva natural, donde, respetando la configuración natural de las rocas y las formaciones geológicas milenarias, hemos acomodado hasta tres plantas de rincones encantadores, donde charlar, tomar una copa, cenar... en cualquier caso, dejarse acompañar por la energía de las piedras en un lugar único.Nuestro exterior no es menos hermoso, pues contamos con tres terrazas escalonadas, a donde llega"
Dirección: Paseo del Huécar , Cuenca 16001, ES
Teléfono: 648 10 11 10
Ciudad: Cuenca
Ruta: Paseo del Huécar
Código postal: 16001


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Reseñas
Curioso restaurante dentro de una cueva con una decoración bastante peculiar. La accesibilidad es difícil porque hay muchas escaleras, pero una vez dentro, se está muy bien. La carta es extensa y muy variada, con cosas bastante modernas y originales. Los platos son abundantes y con buena presentación. Recomiendo las croquetas y los huevos rotos con jamón y trufa. El precio es elevado, pero el sitio se paga y la comida está muy buena. Los postres son correctos, pero nada excepcional. El personal es muy amable y el servicio es bastante rápido pese a que estaba lleno. Muy recomendable.
La sala dentro de una cueva es espectacular. Dispone también de una terraza genial, con iluminación que la hace muy bonita. Ideal para tomar unas copas. Se accede a traves de escaleras. La comida estaba buenísima y de precios no son económicos pero no están disparados tampoco. El personal es muy amable y servicial.
Sitio espectacular y precioso, es diferente a todos los restaurantes. Y estoy segura que la terraza en verano estará llena porque tiene muchísimo encanto. La comida estaba buena pero no estaba caliente... El sitio merece la pena, puedes ir también a tomar unas copas. No apto para personas minusválidas.
Desde el momento que entras por la puerta te quedas alucinando. Todo un restaurante metido en el interior de la propia roca. No puedes dejar de visitarlo a tu paso por Cuenca. Además, hemos probado platos riquísimos. Nos encantaron las croquetas, y sobre todo los huevos rotos con mollejas. ¡Espectaculares! El servicio también de 10. Nos vamos encantados. ¡Muchas gracias!
Fantástico restaurante en un enclave único y espectaculares vistas. Buen servicio y profesionalidad por parte de todos los empleados. Muy buena relación calidad - precio. La prestación de los platos te sorprenderá, especialmente a los niños. Tras la cena, una copa en su terraza y recomendable el visitar la cueva por dentro y lo bien que la han adaptado. Si alguna vez vuelvo por aquí, será de obligado el visitarlo de nuevo. Admisión de niños: Comida muy preparada para niños, con especial cuidado en la presentación y detalles muy curiosos. Aparcamiento: Cercanos y fácil. Yo llegaba tarde, por lo que aparqué en uno subterráneo de pago muy cerca del restaurante.
Espectacular. Ambiente magnífico y una acústica inmejorable porque el ruido está muy minimizado al estar en la cueva. El servicio es muy atento y rápido. Y la comida... Genial. Huevos rotos con foie y trufa riquísimos; las croquetas de jamón bien cremosas aunque me sobra un poco el alioli de la base; secreto ibérico a la brasa estupendo y la leche frita de postre es un tremendo acierto, mejor que los hojaldres con chocolate y coco. Mi enhorabuena.
Expectativas muy altas que terminaron en decepción. LO MEJOR: - El lugar es espectacular, restaurante dentro de una cueva que cuenta con varios niveles de altura y varios entornos decorados con mucho gusto. - Los camareros están atentos y las comandas salen rápido de cocina. - Ensalada caprese muy buena y falso helado de ajoarriero correcto - No hay cobertura pero ofrecen conexión wifi LO PEOR: - Una de las camareras podría ser más simpática - Cerveza caliente - Carta que no sigue criterio alguno - Productos con rebozados muy bastos y aceitosos. Algunos productos parecían de baja calidad. - Baños encharcados Precio medio por persona 20-25€
Reservamos en terraza ,porque vimos que tenia unas vistas espectaculares pero llovía y nos pasaron dentro. Nos gusto mucho más, porque estábamos dentro de una cueva de muchas plantas. Un sitio súper original , estaba todo muy bueno y el trato del personal muy bien, todos muy simpáticos.
Precioso para ir de noche a tomar un cóctel en su terraza, buenos precios. Decoración exterior con luces muy bonita. Aún así, lo más impresionante es su restaurante interior, construido dentro de la cueva. Espectacular.
Una buena experiencia, el entorno muy bonito y pintoresco, con unas vistas a la parte antigua de Cuenca espectacular. La cueva me encantó se estaba fresquito y agradable. La comida muy rica para mi opinión las croquetas de jamón creo que fue mi plato favorito, y la hamburguesa que vino después un verdadero manjar, con una presentación exquisita, el precio un poquito elevado para mi gusto, pero la experiencia vale la pena. En nuestra próxima visita a Cuenca volveremos seguro
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