Un lugar único y especial para un día único y especial.
"El Antiguo Convento" es una empresa familiar que desde hace más de 10 años gestiona el hotel-restaurante El Antiguo Convento de Boadilla del Monte, un complejo hostelero de singular belleza, ubicado en un convento carmelita del siglo XVII restaurado.
Dispone de de 17 habitaciones dobles cuidadosamente decoradas y equipadas con todo lujo de detalles, de amplios salones para la celebración de eventos.
La empresa cuenta además con un servicio de catering que opera en toda la Comunidad de Madrid los 365 del año y gestiona, desde mayo de 2009, todos los servicios de restauración del Museo Thyssen-Bornemisza incluyendo la explotación de la cafetería-restaurante y del restaurante gastronómico El Mirador del Museo, así como la gestión de los servicios de catering que la pinacoteca pone a disposición de los clientes para sus eventos y vistas privados.
Daniel Napal, coincide en que para que un restaurante funcione no es necesario bailar al son de la música de cada momento. Ni pretenden reinventar la cocina ni la sala. Ellos apuestan por mantener día a día el nivel de calidad que exige su público (algo que es difícil hasta en las mejores casas) y por ofrecer materias primas que no se encuentran en otros restaurantes y un servicio impecable. Para ello apuestan por una cocina de base tradicional, con recetas sencillas y productos muy exclusivos y de temporada (como setas y trufas, carnes de caza y carnes exóticas), que gusta tanto a los paladares más tradicionales como a aquellos ávidos de sensaciones nuevas. Y lo hacen en un ambiente elegante y discreto, con mesas espaciosas y distantes, mantelería de lino, vajilla Rosenthal y un servicio atento y casi invisible.
La carta el Antiguo Convento es una sorpresa cada día porque tiene sugerencias en función de lo que hayan encontrado en el mercado y cambia cada temporada. En otoño destacan sus jornadas gastronómicas de setas y caza, en las que se puede degustar jabalí, ciervo o liebre con níscalos y boletus, y las exitosas jornadas de carnes exóticas que están celebrando actualmente, en las que se ofrecen platos de cocodrilo de Zimbaue, bisonte de Canadá, canguro australiano y avestruz de Nueva Zelanda. Entre los clásicos del Convento destacan los raviolis de txangurro, las manitas de cerdo, la brandada de bacalao y el Tiramisú del Convento, un postre muy demandado que nunca ha salido de la carta. Mención especial merece su carta de vinos, con más de 100 referencias de valores seguros y vinos de siempre así como vinos especiales y de autor.
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