El Balcon de las Nieves

Magnífica estancia en El balcón de las Nieves, el hotel es precioso. Ha sido una estancia muy agradable. El servicio extraordinario, por parte de Natasha y de todo el personal, nos han tratado de maravilla. El sábado teníamos que salir antes para hacer una ruta y nos lo dejaron todo preparado el día anterior para el desayuno. Estuvimos como en casa. Cenamos dos noches allí. La comida muy buena. Natasha es una gran cocinera. Las vistas de la habitación espectaculares. Una estancia de 10. Superó nuestras expectativas.

Hace tiempo que no disfrutamos tanto de un sitio. No tengo ni una queja. Fui con mi pareja y ha sido una estancia espectacular. -Desde el personal: La chica en la recepción Rosa, super amable, las chicas por la noche en el restaurante una era nueva era su primer día, super amable también. El dueño por la mañana cuando nos tomamos desayuno desprendía una energía muy buena. Y los perritos acompañando siempre. -Limpieza: Todo super limpio, ninguna queja -Tranquilidad: se respira allí una energía mágica, desde que entramos notamos una paz especial. -Desayuno: Perfecto, todo sabroso, el dueño como dije muy amable con una energía guay. Se nota que hace las cosas con mimo. RESUMEN. últimamente nos llevábamos decepciones cuando viajamos por España, lugares/hoteles que estaban mucho más caros y no ofrecían ni de lejos lo que experimentamos allí. Nos fuimos super contentos y ya con ganas de volver allí. Sin duda, al volver a Granada, nos alojamos allí. Gracias por todo, hacéis mundo mejor Ah! y casi me olvidé de los conejos, que bonitos eran. Hasta pronto

Un lugar con mucho encanto, fuimos a pasar una noche por nuestro aniversario, y todo estaba precioso, la habitación muy acogedora y con vistas inmejorables, la cama muy cómoda, el personal muy amable y la cena de Natasha buenísima, un encanto. Y como olvidar a Logan y Duna unos anfitriones peludos que te llenan de alegría. Sin duda repetiremos

+ Es un lugar apartado, y tranquilo. Tiene un patio tranquilo con piscina con muy buenas vistas donde hay paz. EL desayuno es excelente. La wifi no funcional mal para donde está el sitio. El check in y out es rápido y el personal es muy amable. Hay aparcamiento fuera. - El ruido de algunas personas que no saben bajar o subir escaleras en silencio, lo que hace que uno se despierte de manera intempestiva. El baño tiene una puerta que entre el lavabo y el váter es bastante incómoda. Estuve en la habitación 3, no sé si es común a todas. Hay perros, por si no le gusta a los demás visitantes. A mí me dan igual.

Estar en casa sin estarlo. Así se resume todo. El equipo que ha formado Pedro es espectacular. Natacha es una persona adorable y servicial. Todo el equipo hacen que tanto María Jesús como yo hayamos encontrado nuestro sitio para futuras escapadas. La cocina y el desayuno son insuperables. Duna y Logan son adorables y apretujables. Ya estamos mirando la fecha para volver. Volveremos seguro.

Un hotel con mucho encanto. Si lo que quieres es relajarte, desde luego este es tu lugar. El personal de 10. Te hacen sentir como en casa. Ahhh y las cenas espectaculares. Natacha es una cocinera . Volveremos a repetir seguro.

Excelente!!! Un sitio cálido, con unas vistas preciosas. Una atención familiar y dedicada y una cocina excepcional. Recomendable! Modificó mi reseña. Agrego que quise volver a reservar y que ahora no aceptan niños. Solo para parejas. Me parece horrible. Es una lastima.

Ha sido una experiencia maravillosa. El trato cercano y delicioso, todo limpio, al hotel no le falta detalle. La cena buenísima y el desayuno exquisito, todo casero y muy bueno. La cama súper cómoda y las vistas y el paraje inmejorables. Repetiremos sin duda, ha sido una escapada perfecta. 100% recomendable. Gracias por vuestra amabilidad

Un lugar muy bonito para desconectar y relajarse. Nos quedamos a cenar allí y estaba todo muy bueno. La cocina es toda casera hecha allí mismo, iremos a cenar alguna noche, se está muy fresquito. El desayuno nos encantó, muy casero todo como si estuvieras en casa. Hacen un yogurt casero buenísimo un sabor muy suave y muy rico, de los mejores yogures caseros que he probado, lo recomiendo.

Sin lugar a dudas nuestro hotel preferido. Es un lugar con encanto en donde te encuentras como en casa. El trato es realmente bueno y cercano, la comida es espectacular, y los anfitriones perrunos son puro amor. Además, por su situación tiene unas vistas espectaculares tanto de la Sierra como de Granada. Es ideal tanto para desconectar y hacer rutas de senderismo, como para visitar Granada o Sierra Nevada.