El Dromedario Records

Sobre Nosotros

El nacimiento de EDR, es una necesidad de dotación de infraestructura para que nuestros discos puedan ver la luz dignamente y tener una continuidad.

Historia

EL DROMEDARIO RECORDS es un sello discográfico que nace a finales de 2013 en Pamplona de manos de Alén Ayerdi Duque, músico profesional con más de 20 años de trayectoria; batería de Marea y Ciclonautas, representante de Extremoduro y Roberto Iniesta “Robe”, y Licenciado en Economía por la Universidad Pública de Navarra, y J. Óscar Beorlegui Ochoa, periodista profesional con trayectoria en revistas como El Tubo, El Bolo Feroz o Rock Estatal; en el diario Gara, y, desde 2004, crítico musical de Diario de Noticias de Navarra; este último, autor de la biografía de Marea La alegría en puñados de a diez, cursó estudios de Filología en la Universidad de Navarra y es Community Manager titulado por la UNED. Fruto de más de dos décadas de compañerismo y amistad; de apasionadas charlas y profundos análisis sociológicos sobre discos, conciertos y la situación de la música y de la industria en general, ambos, sin darnos cuenta, fuimos dando forma a lo que hoy es EDR.

EDR nace de la impotencia de no poder confiar a nadie nuestros propios proyectos, como única forma de asegurar el poder dar continuidad a todos ellos, y desde la necesidad de asegurar desde el punto de vista financiero la reinversión de lo generado en el siguiente disco, en el próximo videoclip o en cualquier otra forma de promoción, en definitiva, en que no pare la rueda.

El por qué del nombre El Dromedario Records : El nacimiento de EDR como hemos explicado no es vocacional, es una auténtica necesidad de dotación de infraestructura para que nuestros discos, pilares en los que se sustenta la carrera de cada grupo, puedan ver la luz dignamente y tener una continuidad. Por lo que nuestro negocio no es tanto vender discos ( en dicho caso el nombre hubiera sido El Camello), sino más bien, el consumo propio entendido como la creación y organización de infraestructura para grabar, distribuir y promocionar discos, y la retroalimentación de cada proyecto en aras de su propia financiación y continuidad. Por todo ello, El Dromedario resulta mucho más apropiado.