Reseñas
Entiendo que Mario Sandoval diseña la carta de este restaurante y poco más. No creo que un cocinero de su talla estuviese realmente contento con el nivel de cocina que ofrecen a sus clientes. Nada de lo que probamos estaba malo, pero tampoco hubo ningún plato, más allá del cochinillo, que mereciese realmente la pena. Es una pena, porque su terraza es increíble, de las mejores que hay en Chamberí. Con los entrantes empezamos bien, ambos, tartar de salmón y ravioli de langostinos, estaban buenos, aunque sin tirar cohetes. En los segundo, a parte de lo dicho con el cochinillo, regular el rodaballo, con poca gracia, y muy mal el steak tartar, muy muy flojo y pasado de pimienta negra. En los postres el tema mejoró, bien todos ellos, desde la tarta hasta las migas de chocolate, pasando por la pannacotta de lima y albaricoque y la sinfonía de chocolate. Pero el problema principal es que si a una comida floja le sumas un servicio deficiente y un precio alto, hace que igual la terraza no compense lo suficiente. Puntos fuertes: su terraza es impresionante. Puntos débiles: pasado de precio. Servicio muy flojo. Precio: a partir de 70€ por persona. Podéis seguirnos también en nuestra cuenta de Instagram, @madridbocados. Allí encontrarás reseñas detalladas. Hasta el próximo bocado.
Un sitio precioso y elegante. Enhorabuena al cocinero Alejandro la comida maravillosa, mezcla de sabores y texturas. Los camareros muy atentos y amables, Ángel atento cuidando cada detalle. Lugar para repetir lo recomiendo 100%
Tomamos el Té Experience,un domingo y realmente es una experiencia,te sientes como una dama de la alta sociedad del s.XIX...el salón,precioso,la atención exquisita,Ivana encantadora y siempre atenta.Los tés y demás dulces y sandwiches,muy finos y ricos. Un oasis de tranquilidad, habrá que volver en verano,porque ese jardín se merece otra visita.
Brunch mágico y elegante. Los camareros de 10 muy atentos y amables. Relación calidad precio muy buenas, quizás un poco más de variedad. La calidad muy buena, el champán moet le da un toque de romanticismo y exclusividad. La decoración, el ambiente el lugar mágico. Sitio para repetir.
Terraza muy agradable. Buena calidad pero he echado de menos algo de originalidad en la propuesta la carta me ha parecido demasiado corta
Terraza muy agradable donde disfrutamos de la celebración de mi cumpleaños. Atención muy profesional por parte del maitre. Muy atentos los camareros. Detalles personalizados duranteee la cena. La cocina de Mario Sandoval exquisita. Explosión de sabores. Recomendable para eventos por su estilo clásico y elegante
Fui para celebrar mi boda, éramos 4 y adaptaron a cada uno el menú degustación vegetariana, celíaco y alérgico al marisco y salió todo genial y súper rico. El ambiente es calmado y precioso. La atención exquisita. Muy agradecida por los cambios en el menú para hacerlo vegetariano que me permito comer al ritmo de los demás.
Hemos tomado el menú san Valentín el de 5 platos con maridaje y la verdad que no te cambia en absoluto la vida. No está mal, pero, sin más. Me esperaba algo mucho mejor, por el nombre que tiene y sobre todo, por el precio
Cerca de la plaza de Colón está el Restaurante Jardín de Orfila que tiene como chef ejecutivo a Mario Sandoval. Decoración elegante y una terraza interior ajardinada espectacular que suele estar muy solicitada. Cocina de mercado con productos de primera. Para empezar muy sabroso el capuchino de patata y trufa, y como principal una increíble lubina con salsa de ají amarillo y gamba cristal. La atención y servicio de diez, incluso tuvieron un detalle de cortesía en la cuenta.
Qué sitio más agradable y qué comida más exquisita. Los camareros son encantadores y muy profesionales. El ambiente no puede ser mejor, un oasis en medio de Madrid.