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Reseñas, información para El Pelikano

Dirección: Paseo maritimo Rio Piedras, El Rompido, Andalucia, Spain
Teléfono: +34959399755
Ciudad: El Rompido
Ruta: Paseo maritimo Rio Piedras



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Reseñas
Qué suerte tener en El Rompido un lugar en constante evolución, desde el verano pasado tanto la carta como las referencias de la carta de vinos han dado un giro de 180 grados. Propuestas novedosas, donde sigue primando un producto espectacular, pero al que se añaden toques arriesgados que hacen que la experiencia vaya más allá de comer muy bien y tener unas excepcionales vistas. Todos, absolutamente todos, los platos que probé tenían un plus, para no perderse: la ensaladilla de gambas al ajillo, el tartar de atún rojo, la merluza de pincho a la romana cuya sutileza y jugosidad eran para comerse un tabal y como no, las gambas al ajillo, creía haber probado unas insuperables en Ispal, pero he de reconocer que éstas son las mejores que he probado hasta ahora, confitadas a fuego lento, una maravilla, menos mal que acompañan con un pan de Aracena que está a la altura, cosa de la que adolecen muchos restaurantes y que aquí se agradece enormemente que le presten atención. Tanto las colas de cigala en tempura como los huevos rotos de alistados son espectaculares. El pan bao de puntillitas, delicioso y de los postres me quedo con la tarta de queso. No os hablo de los vinos pero sí os aconsejo que os dejéis llevar por la sugerencias de David. Para repetir una y mil veces. Altamente recomendable.
Está situado al fondo del CC El Faro del Rompido y por lo mismo es, quizás, el sitio más tranquilo de la zona, lo cual se agradece bastante pues hay personas que preferimos comer en paz sin ruido ni jaleos. El trato del personal es exquisito, siempre atentos sin llegar a incomodar. Pedimos de entrada un tomate kumato con aguacate, mozarella y pesto que estaba delicioso, y unos huevos de choco a la plancha muy ricos, aunque pequeñitos pero muy buenos. De plato fuerte pedimos un arroz negro que estaba muy sabroso pero tenía algunos granos un pelín duros. Por este motivo no le doy 5 estrellas en mi valoración, pero siendo justos, estaba sabroso salvo este detalle. Se lo dijimos al personal y ofrecieron unas disculpas y además nos hicieron un descuento por este inconveniente. Realmente se agradece que muestren interés en agradar a los clientes y entendemos que a veces pueden suceder estas cosas. De postre pedimos torrijas que estaban simplemente espectaculares. De diez. Las vistas del sitio una gozada, la comida bien servida, el personal muy amable y el ambiente tranquilo. Nada más que pedir. Repetiremos antes de que llegue el verano y se llene de gente y ruido, sin duda.
Nos ha encantado comer aquí. Muy buenas vistas . La atención del personal del restaurante maravillosa , atentos y muy simpáticos , nos hemos sentido super agusto y cómodos. Para comer hemos pedido un arroz de gamba roja y estaba muy bueno , con un fondo muy rico. Repetiremos , y recomendamos visitarlos. Admisión de niños: Tienen trona .
El sitio muy agradable y personal profesional y atento. El arroz de gamba roja muy rico y meloso... La escalivada con jamón 5J muy recomendable... Todo bien preparado y presentado. Con bastante opciones para celíacos...Volveremos seguro
Es tal el movimiento de la hostelería que hay en El Rompido que las reseñas pierden valor de un año para otro. Los cambios de nombre, de personal, de propiedad de gestión y de concepto hacen que lo que escribiste el año pasado ya no valga hoy. Solo algunas cosas permanecen inmutables y una de ellas es la ubicación, que aquí está ligada al tipo de público al que se dirige el negocio. Oceánico está en el centro comercial El Faro y ocupa uno de los locales que mirando hacia el Oeste se beneficia de una vista privilegiada. El local es estupendo y tiene una pequeña barra inutilizada y dos comedores. Uno en el exterior y otro interior. La decoración es escasa, discreta y luminosa. Aquí lo importante son las vistas. No había música cuando fuimos, un día entre semana a la hora de comer, pero puedo asegurar que en fin de semana la placidez del lugar se verá alterada por vecinos escandalosos que compiten entre sí para aturdir al personal. La carta es la de siempre, la que se estila por aquí sin nada que destacar en la cocina y si en algún producto que no se suele encontrar. Varían a diario y por eso la carta cambia también, pero es lo de siempre. Por lo que Oceánico destaca es por cosas que, si bien parecen accesorias, lo hacen algo distinto de la competencia. Empezando por el pan. Es quizás el mejor que se puede encontrar por aquí. Proviene de un proveedor de Aracena que lo sirve en exclusiva y que hace bueno cualquier aceite con el que se mezcle sin quitarle protagonismo. Fresco, recién cortado y en su punto de temperatura aunque haya sido horneado con días de antelación. A destacar también la presentación de los platos que es más cuidada de lo habitual y eso favorece el consumo. Pero lo mejor de este sitio, además de la ubicación es el servicio. Hay profesionales en la sala y eso se nota. Es verdad que no debe ser lo mismo ir en marzo que en agosto pero el día de nuestra visita había mucho fundamento en sala. Amabilidad, rapidez, discreción. Un lujo. Y de propina un profesional de la coctelería que te descubrirá combinados a tu medida, sorprendentes, adecuados para el momento y muy agradables. ¡Qué gran labor la de la escuela de Islantilla! Pese a todo lo anterior, los precios no son mucho más altos de lo que se estila por aquí. Puedes comer por unos 40€ que debe ser más o menos el tique medio en un sitio de este tipo. Oceánico es un sitio que mezcla lo de siempre con algunos rasgos distintivos que aportan valor al que va buscando cierto refinamiento.
El lugar tiene unas vistas maravillosas. La comida no estuvo mal del todo. Pedímos unos mejillones de Galicia según la carta que sí eran de calidad . Pero tras éste plato, tocaba uno de Tarantelo y nos dio tiempo a contemplar el mar, el aleteo de los peces, el vuelo de los pájaros y los pasos de los cangrejos que sumaron 20 minutos para que nos dijeran que se les había olvidado el plato de atún. Al final lo tuvimos que anular. Por lo demás todo ha estado bien. Lo recomiendo
Lugar espectacular…..con unas vistas increíbles… mención especial al servicio..concretamente Julian… ademas de buena gente, un profesional como la copa de un Pino… nos dejamos aconsejar y el resultado inmejorable.. la ensaladilla de carabineros.. asi como las croquetas también de carabineros…deliciosas!!… y el arroz con bogavante muy muy rico…. Sin duda repetiremos!!!…
La comida buenísima y las vistas espectaculares, los camareros nos atendieron muy bien, recomiendo la tarta de queso. Aunque la carne las he probado mejores.. y el precio bueno imagino que normal por las vistas.
Excelente terraza, cómoda y servicio. Personal muy amable. Sin aglomeración ni agobio. Todo muy rico , lenguado, gambas, coquinas, etc. Buenos postres.
Aunque no buscábamos este restaurante ,el nos encontró a nosotros.Por las vistas al puerto,disfrutando de un mediodía soleado. Y la carta con platos muy innovadores con buena calidad y presencia. Es un precio asumible teniendo en cuenta el trato personalizado de el servicio. Volveré.
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