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Reseñas, información para Escuela De Yoga Integral Mahashakti

Escuela De Yoga Integral Mahashakti

Sobre Nosotros

Escuela de formación de Profesoras/es de Yoga Integral. También organizamos cursos de Formación en Yoga infantil, retiros en la naturaleza e intensivos.



"La Escuela de Yoga Integral Mahashakti, es un proyecto que tiene, entre otros objetivos, el exponer y desarrollar las bases del Yoga Integral. Inspirados en las enseñanzas de Sri Aurobindo y en la experiencia yoguica de Saranagatidas ofrecemos un Yoga vivo sin rigideces ni dogmas, que atiende como instructor último al Maestro que cada uno portamos en nuestro interior, que promueve el encuentro de lo espiritual con la vida en medio de la vida, siendo esta fusión la base principal de nuestro Yoga. Ofrecemos esta enseñanza promoviendo cursos de formación de Profesores/as de Yoga, retiros, masters, clases y actividades diversas."
Dirección: Paraje Erlosiana 143, 31496 Ujué
Teléfono: 650060065
moc.itkahsahamaleucse@ofni
Ciudad: Ujué
Ruta: Paraje Erlosiana 143
Código postal: 31496


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Reseñas
Una Escuela de yoga que profundiza en la esencia espiritual del yoga sin perder la profesionalidad y el método científico tanto en sus retiros vacacionales como en las formaciones de yoga que imparten. A mí me cambió la vida. Siempre gracias por todo el bien que hacéis a la gente.
Realicé la Formación de Profesores en la Escuela Mahashakti, y la experiencia es totalmente recomendable. La enseñanza se transmite desde la honestidad, el rigor y la profesionalidad. Los retiros a los que asistí en la formación los disfruté mucho, en un espacio espectacular en plena Sierra, sin echar nada en falta. A demás se come genial : Enormemente agradecida por todo lo recibido
Me encanta la Escuela. Realicé la formación de profesora de yoga con ellos, continué con formación específica que también ofrecen y he visitado el Ashram desde entonces. Tengo un trocito de corazón en Ujué. La calidad humana, la profesionalidad y seriedad de los docentes hicieron de mi proceso formativo no sólo una vía de adquisición de conocimientos de yoga, sino un camino de transformación personal. Me sentí realmente acompañada. A día de hoy sigo teniendo contacto con ellos, pudiéndoles consultar las dudas con las que me voy encontrando, tanto en mi práctica personal como cuando he impartido clases. Agradecida a esta enseñanza y a la Escuela.
Enamorada de las clases de yoga de mi maestra en el pueblo, reconocí la llamada de querer profundizar más en el Yoga. Gracias a ella y su recomendación, empecé la formación en La Escuela de Yoga Integral Mahashakti. Considero que fue una de las mejores decisiones de mi vida. La pureza de la enseñanza ha hecho que vaya reconociendo lo mejor que hay en mí ; aportándome un conocimiento para realizar una práctica yóguica transcendente. Esto es lo que más me ha llenado de la escuela, que mantiene el objetivo primigenio del yoga : "...el encuentro y realización del ser humano con la verdad más profunda de sí mismo, del universo, y de lo que está más allá de ambos ". Desde mi punto de vista, es una formación muy completa que abarca Filosofía del Yoga , Psicología Yóguica , Meditación , Hatha Yoga, anatomía , Pedagogía del Yoga Integral, etc.... Además de unos retiros increíbles en la naturaleza del Ashram en Ujué ideales para un buen trabajo personal. 100% recomendable, más en estos tiempos de pandemia, donde una salud integral es necesaria. Gracias.
Conocer esta escuela me cambió la vida. Quería vivir más tranquila, y por eso comencé con el yoga. Al principio me costó, pero sentí que podía apoyarme en los profesores. Con el yoga integral aprendí a relajarme, a respirar, a manejar mis pensamientos y mis emociones. La profesionalidad de los docentes y la calidad de lo que trasmiten...El ashram que esta en un espacio natural ideal... totalmente recomendable!
Suelo acudir habitualmente a retiros de yoga; he probado unos cuantos por toda España y siempre han sido experiencias muy satisfactorias.  Guiada por las reseñas tan positivas que tenía Mahashakti, me animé a asistir al retiro de esta pasada Semana Santa. Lo que me encontré allí desde luego fue, cuanto menos, curioso y nada satisfactorio, por lo que comparto mi experiencia simplemente para que la gente que se anime a ir tenga en cuenta lo que se va a encontrar y no se lleve una sorpresa. Normalmente, los organizadores y profesores de este tipo de retiros suelen ser personas cálidas, empáticas y siempre pendientes de que los asistentes estemos cómodos y a gusto.  Aquí no te daban casi ni los buenos días y la actitud era continuamente fría y distante. Normalmente, el asistente siempre tiene un programa con los horarios de las actividades a desarrollar. No fue este el caso. Y a veces quizá apetece tomarte un rato para ti mismo en lugar de ir a la actividad, pero no puedes valorar si te compensa “perder” la actividad o no. Llevo practicando yoga varios años y jamás me había encontrado con clases así; había gente que no había practicado nunca y eso no fue tomado en cuenta y se nos forzaba continuamente a llegar “al límite”.  Varias personas acabaron las actividades llorando. La comida dejó también bastante que desear ya que todos los días se come lo mismo y no se adquieren los nutrientes necesarios para el desgaste físico y emocional que exige el retiro.  No digo que tenga que estar a la altura de un estrella Michelín, simplemente es de agradecer un poco de variación.  Soy vegana y con cuatro cositas se pueden hacer platos fáciles y deliciosos. No nos advirtieron que en el recinto no había cobertura, más que nada por avisar a familiares antes de llegar. Eso sí, te ofrecen que dejes el número de ellos ellos en cambio tienen cobertura en todos sus dispositivos, curioso. Por último, las instalaciones son muy austeras. Algunos compañeros se duchaban con agua fría lo achacaban a las placas solares, no se puede usar el secador por las placas solares, usar el baño es una odisea porque lo compartes con un montón de personas, etc.  Es su proyecto, su sitio, sus normas.  Totalmente aceptable.  Pero sería de agradecer que lo advirtieran antes de ir, y sobre todo, de pagar.
Asistí al retiro de Semana Santa y he de decir que no era lo que estaba buscando. Había ido a otro retiro, tenía ganas de salir de la rutina de la ciudad y me animé a probar. Lo primero que me chocó al llegar y, el resto de días, fue el ambiente por parte del staff. Eran muy distantes y marcando una diferencia entre los asistentes y los organizadores continuamente. Las clases se desarrollaban en la completa monotonía, es decir, todos los días lo mismo con una mínima variación. Llevo practicando yoga muchos años y no había visto semejante disparate nunca. En una clase de Hatha donde hay distintos niveles, en la que había gente que jamás había practicado yoga, no se tenía en cuenta esto y se forzaba continuamente a llegar “al límite” con lo que la gente salía, literal, llorando de las clases. Me sentí totalmente desconectada de esa rara atmósfera y paseé por el recinto y estuve al aire libre, pues pasábamos la mayor parte del día en la sala practicando. No encontré esos espacios, a menos que te saltes la clase, para poder estar en tranquilidad y contigo misma. Porque tampoco te dan un programa al llegar y no sabes qué clase será hasta un momento antes. La comida fue algo curioso también. Se come todos los días lo mismo. En otros retiros la comida vegana suele ser una delicia, pero aquí lo cierto es que llega a hartar y muy limitada. No nos avisaron de que en el recinto no había cobertura, más que nada por avisar a familiares antes de llegar. Eso sí, te ofrecen que dejes el número de ellos. Pero lo mínimo es avisar, creo. Por último, las instalaciones son muy austeras. Algunos compañeros se duchaban con agua fría lo achacaban a las placas solares, no se puede usar el secador por las placas solares, usar el baño a veces es una odisea, etc. Definitivamente es un formato que no encaja conmigo. Me había guiado por las opiniones y, por ello, quiero dejar mi experiencia por si puede orientar a alguien a la hora de decidirse a realizar el retiro.
Hay dos días relevantes en mi vida, mi nacimiento y ese " volver a nacer " cuando descubrí las enseñanzas del Yoga integral . Gracias a la escuela de Yoga Integral Mahashakti he tenido la oportunidad de tener este crecimiento personal que sé tiene un inicio, pero no tiene fin. Gracias al equipo de Profesores Mahashakti por sé portadores y particípes de un Yoga por y para el bien de la humanidad, por trabajar desde el corazón y dar lo mejor aún en tiempos difíciles. Gracias a todos los compañeros/as a los/as que aportaron bondades, aprendizaje y compasión para los que aún no aprendieron a ver el camino. Y siempre gracias, a la Divina Luz que nos arropa dentro y fuera de cada una/o de nosotras/os. Namaste
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