Reseñas
Pedimos uno de los menús que tienen 30 y pocos euros y estaba bastante bueno. Todos los platos son para compartir y las raciones son más que suficientes. No hay límite de bebida ni de pan. Como pega diría que los postres no son nada del otro mundo.
Fuimos el otro día a cenar, y la cena estuvo muy correcta con sus luces y sombras. Sombras, las croquetas de parmesano, no saben a queso, son cremosas y textura bien, pero no tienen sabor en el interior. Luego pedimos una copa de Larios, y no tenían siendo la Ginebra más básica, puede pasar, pero la chica no supo “compensar” eso, cuando podría tener el detalle de haber ofrecido otra cosa. Las gambas al ajillo, los huevos y el Brownie, buenísimo. Para disfrutarlo. El carajillo, como toca, de Castellón. Con su alcohol quemado bien
Lo recomiendo. Desde mi punto de vista, este es el mejor restaurante del Grupo La Guindilla. Local rústico y acogedor, atención correcta, relación calidad-precio adecuada y la comida bastante buena.
La chica es muy agradable , el local amplio y limpio . Los bocadillos salieron en 3 minutos y estabasn buenísimos Recomiendo mucho
Éramos un grupo de 5 personas y hemos cogido un menú de 35€. Muy completo, buena atención y servicio de mesa. Además la comida que ha sobrado nos la han puesto para llevar cosa que se agrede para evitar el desperdicio de alimentos. En general estupendo, repetiremos.
"Comevieja" espectacular. Platos muy bien presentados y con un sabor delicioso. Menú de 37€ con tapas para cada 4, postres y cafés, salimos rodando. Todo a tiempo y el servicio con muy buena actitud.Comida: 5/5
Lugar rústico y acogedor. Cenamos en las mesas de barril que hay en la entrada. Pedimos ensalada con naranja y naranja, jamón ibérico, sepionet con alcachofas y habas, secreto sobre nachos y de postre brownie de chocolate blanco y helado de vainilla negra. Toda una sorpresa al verlo, ya que era diferente y estaba buenísimo!!! Atención adecuada. 100% recomendable.
Fuimos a cenar 4 personas. Pedimos croquetas de jamón, huevos con setas y foie, pulpo y carrillera. Definitivamente lo mejor el pulpo, espectacular, sobre todo el puré. De entre los postre muy destacable el brownie de chocolate blanco. El servicio correcto.
Muy buena experiencia gastronómica, precio súper razonable para la cantidad y el sabor de la comida. Soraya gran trabajadora y muy simpática y mencionar también a los cocineros. Volveré seguro.
Tercera vez que he visitado este restaurante y he salido muy contento. Los platos están muy buenos: pulpo, sepia, tartar de atún, chuletón, todos nos gustaron. Los postres también nos sorprendieron para bien con el brownie de chocolate blanco y pistacho con helado de chocolate y la crema catalana con helado de leche merengada y piña. Volveré