Jamón55

Fuimos a cenar al salir del Rey León, puedes degustar un buen jamón acompañado con pan con tomate, entre otras tapas, todas muy ricas con un buen vino, el local amplio, con decoración moderna con su toque de pata negra y el servicio muy atento y amable.

Lugar vacío… ya debería habernos llamado la atención. A pesar de eso, los camareros se van y no vuelven. Tienen una política de que en mesa no dam bocatas, algo por lo menos llamativo y polémico. Pedimos unos vasos de agua para los niños y dijeron que no, que solo venden botellas, algo directamente ilegal. La comida aceptable, pero todo en porciones pequeñas y carísimo. Los baños, otro tema, muy sucios y sin mantenimiento. Realmente no merece la pena ir a este lugar, hay muchos mejores y a mejor precio en los alrededores

Desagradable la visita. Ni nos prestaron el baño lugar cutre con personas que te tratan súper mal! No lo recomiendo ni volveré

Una mala elección para cenar en la noche madrileña tanto en servicio como en calidad. Los bocadillos pobres en sabor para cobrarlos a ese precio, con un jamón de marca blanca. Resumiendo: Una vez y nunca... MÁS. Desde mi experiencia local nada recomendable.

Buen servicio por parte del camarero que nos atendió, pero nada recomendable la ensalada, donde el tomate, fue lo más asqueroso que he comido en mi vida. Duro como una piedra por lo que era imposible masticarlo con normalidad, como si fuera la cáscara de una nuez

Fuimos al salir del Rey León. A las 23h y nos atendieron sin problema. El precio pica un poco pero se entiende por l ubicación. Los camareros fueron correctos y hasta en un momento no nos salí la palabra boquerón seitó en catalán y nos entendieron es anecdótico Las croquetas estaban muy muy muy buenas. Lo demás también pero nos sorprendieron. El baño estaba muy limpio y el local ordenado. Recomendable

Pongo una estrella porque no me deja poner menos. No se cómo empezar la reseña siendo educada. El 21 de enero de 2023 entro en este lugar huyendo del frío para consumir una bebida y poder dar de comer a mi bebé de 4 meses que en ese momento estaba llorando. Según entramos por la puerta con el carro, nos dicen que NO podemos pasar con el carro. Ante mi asombro pido una hoja de reclamaciones y se NIEGAN a dármela, CUANDO MI DERECHO ES PEDIRLA Y SU OBLIGACIÓN ENTREGARLA. Pese a la insistencia en que me lo entreguen y su chulería, decidimos llamar a la policía. Frente a la presencia de la policia, deciden darnosla pero en sus alegatos mienten intentando justificarse. NO TIENEN hojas de reclamaciones, las imprimieron en ese momento, no tienen el cartel OBLIGATORIO que tienen que tener reflejando que cuentan con ellas.. en resumen, son unos sinvergüenzas! Poca humanidad, mal educados y encima mentirosos.

En la tarde del sábado, quisimos entrar en el bar ya que hacía mucho frío y mi hijo estaba llorando, al entrar un camarero nos saluda y seguidamente al ver el carro del niño nos dice de muy malas formas que no podemos entrar con el carro le decimos el porque y nos indica que el local es pequeño y no pueden entrar carros ni sillas de rueda, seguidamente le pedimos la hoja de reclamaciones, el camarero hizo oídos sordos y vacilando a mi mujer le dijo entre risas -pídesela al encargado-, al no saber quién es el encargado volvimos a pedirle la hoja de reclamaciones y el camarero otra vez chulo nos dijo -no te la voy a dar no has consumido nada-. Muy a nuestro pesar decidimos llamar a la policía municipal para que nos entregaran dicha hoja de reclamaciones. Al llegar la policía le explicamos lo sucedido y entrar hablar con el encargado, Los policías nos entregan las hojas de reclamaciones que por cierto no tenían originales tuvimos que rellenar 3 copias cuando se ls entregamos ya rellenadas, el encargado del establecimiento nos puso que entramos pidiendo una mesa, cosa que no nos dio ni tiempo hacer, y que en ningún momento fueron mal educados y que a la policía se les llama para cosas urgentes e importantes, todo esto lo escribió el “encargado” que ni si quiera estuvo delante de la conversación que tuvimos con el camarero. Solo puedo decir que este establecimiento nos fastidió la tarde y que mi mujer tuvo que dar de comer al niño de mala manera y en la calle. NO RECOMIENDO ESTE SITIO.

Todo de muy buena calidad Siempre que voy a Gran Vía hago ahí una paradita para degustar su buen jamón, sus anchoas y su pan con tomate, ¡guay!!!

Personal con poca empatía , mini bocadillo de jamón por casi 5€ en el que no se dignan ni a ponerle aceite al pan, les pides tomate y lo primero que te dicen es que son 0,50 céntimos más . Realmente me parece una vergüenza atender tan mal a la gente.