Reseñas
Muy rico y genial de precio. A destacar las empanadillas asiáticas, los ravioli de chipirones y los chipirones rebozados. Tambien la croqueta de jamón de las más ricas que he comido.
Muy recomendable para comer o cenar de raciones y/o platos individuales. También tienen tostas. El local es agradable y reformado y también tienen terraza muy tranquila. Me encantó la sidra natural.
Comimos el día de Navidad mi familia y unos amigos...el menú de 30 y de 40€. Las raciones eran enormes, super buena cantidad y calidad, el trato de los camareros fue exquisito. Enhorabuena al cociner@ en especial.
Muy rico y sabroso todo.
Estuvimos ayer comiendo y nos gustó mucho,la chica que nos atendió muy atenta y los raviolis rellenos de chipirones en su tinta nos gustó mucho.
Platos espectaculares tanto en presentación como en sabor, muy buena atención. ¡Volveremos muy pronto!
Somos clientes semanales de este lugar. Siempre acudimos por varios motivos, entre ellos, cercanía de casa, calidad-precio y atención de los camareros. Siempre atentos y amables. Hoy hemos celebrado el día 10 de agosto y hemos vivido una muy mala experiencia. Entendemos,como familia de hostelería, que son días en los que el caos se apodera de estos sitios. Hemos sido empaticos y pacientes por este mismo motivo. Nos ha costado comer un menú a 3 personas 3 horas y nos hemos ido sin que los postres llegarán a nuestra mesa. Tras comentarle a la encargada el problema y decirle que no pasaba nada, que los descontará y ya, ha pasado olímpicamente de nosotros echando la culpa a la camarera, siendo ésta impecable en trato. Le hemos dicho, ya enfadados, que llevamos varios meses acudiendo y siendo testigos de las malas maneras que suele tener públicamente con sus empleados y lo mal que te hace sentir como cliente. Ella de muy malas maneras ha dicho que "sus" trabajadores no tienen queja y ha dicho que no iba a pedir ni una disculpa. Hemos pagado casi 150€ entre 3 personas, que menos que una disculpa..., Ojalá se empiece a tratar al personal de hostelería en condiciones y que luego no se quejen de que no hay camareros . Con encargados así no me extraña, incapaz a la vista de liderar a ningún equipo ni de tener la mínima educación con los clientes. Que lastima que lugares con tanto encanto y que se come tan bien se eclipsen con personas como ella con estos modales, teniendo a camareros ejemplares de los cuales ella debería de aprender. La clave ... Un poquito de humildad y una dosis de empatía.
Camarero prepotente, no atiende y le llamamos la atención a lo cual contesta con soberbia, media hora después viene a coger comanda y nos lo hace repetir tres veces.Enfadados le pedimos la cuenta en vez de la comanda y le parece estupendo. Nos vuelve a contestar con soberbia y diciendo que el resto se van contentos. He leído las reseñas y jajaja. Nunca más.
La verdad que solo tomamos café, pero las tapas tenían muy buena pinta, sitio que repetiremos para comer o cenar. A los pies de la basílica real y parroquial de San Lorenzo. Café muy bueno, nos sentamos en la terraza en pleno San Lorenzo que prensábamos que tendríamos que entrar a pedir, pero sólo esperamos un poquito y nos atendieron súper bien.Sitio muy recomendable.
Espectacular....la comida, las tapas, el trato de los camareros inolvidable y el trabajo del cocinero currado...muy currado...muy contento de haber caído en este lugar tan acogedor.