El pasado once de septiembre abría las puertas al público el bar-restaurante La Calleja de Urbano, radicado en Calzadilla de los Hermanillos, y gestionado por dos viejos conocidos de la hostelería leonesa: Marcela Munteanu y Javi Caballero Herreros (Casa Pozo, Restaurante La Esponja…).
Empujados por ese amor a la ‘tierrina’ que crece con los años y cierta nostalgia por las raíces, Munteanu y Caballero no se pensaron mucho eso de “volver al pueblo” y seguir haciendo lo que mejor saben hacer: dar muy bien de comer, dar muy bien de beber, y demostrar que la profesionalidad en la hostelería y la calidad en la restauración pueden llegar hasta la calleja más angosta de un pueblo de no más de 200 vecinos.
La Calleja de Urbano, nombre con el que se conoce a ese rinconcito de Calzadilla y lugar donde vivía precisamente el abuelo de Javi Caballero, no tiene mucho que ver (aunque la decoración quiera hacer ese guiño y huela igual de bien) con aquellas ‘cocinitas de ajo y pimentón’ que había en los pueblos leoneses el siglo pasado.
Un atractivo portalón ambientado con aperos de labranza y otros cacharros (tijeras de esquilar, cantimploras, hierros de marcar…) da la bienvenida a la clientela de La Calleja de Urbano, que dispone, una vez dentro, de dos espacios bien diferenciados: Por un lado, una amplísima terraza abierta (próximamente climatizada) donde se ubica la zona de bar-cafetería y, una segunda, ya cerrada, con dos comedores de amplia distribución que ofrecen en conjunto capacidad para unas 30 personas.
La vista se pierde en el interior de la zona de comidas: pinturas, fotografías, cerámicas, antigüedades… cientos de recuerdos decoran las paredes del comedor, ‘presidido’ como no podía ser de otra forma, por el fuego de la lumbre.
Sentados en las impecables mesas del local, los platos que incluye la carta de La Calleja de Urbano no necesitarán mucha ‘traducción’. Fiel respeto al producto, frescura, calidad y fogón puro y duro son las ‘armas’ de seducción que emplearán en la cocina Marcela y Javi, los que mejor asesorarán a los comensales que no se decidan entre los platos estrella: embutido de la tierra, mollejas a la plancha y guisadas, pichones y lechazo, carnes rojas, chicharro al horno y el bacalao, una de las señas de identidad de este nuevo restaurante, que siempre reservará un hueco en su carta para los productos de la temporada. La bodega no se queda atrás y, en ésta, la ‘tierra’ manda (tiene una carta de vinos muy leonesa). Las referencias en alcohol tampoco se quedan atrás.
Trato familiar, experiencia y ganas de ver salir contento al comensal completan el recorrido por La Calleja de Urbano, que abre sus puertas cada día a partir de las 12:00 horas, la hora de la tapa, también deliciosas.
La Calleja de Urbano está gestionada por Marcela Munteanu y Javi Caballero y cuenta con dos números de teléfono donde poder reservar mesa: 987 337 615 y 642 607 944.
La Calleja de Urbano
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