La Mie Dorée

Defraudadores de Hacienda. Estafa absoluta, solo cobran en efectivo y te avisan después de servirte. En el cartel de la puerta pone que sí aceptan tarjeta, pero casualmente si es fin de semana no. Cuando hemos dicho que nos íbamos sin pagar, han sacado el datáfono del cajón. El dueño es un sin vergüenza

Sitio muy bien ubicado en el maravilloso Mercado de Colón de Valencia. Hasta ahí lo bueno. A partir de ahí, pésima calidad de los productos, precios desproporcionados y poca higiene. Para que se hagan una idea, hemos pagado casi 22€ por tres desayunos solo bebida y bollería o tostadas, SIN zumo. Además, se indica en la puerta que se puede pagar con tarjeta a partir de 5€, pero cuando vas a pagar, te indican que mejor con efectivo y solo si insistes, ya te dejan pagar con tarjeta. Un sitio para no volver.

Tardan en atenderte tienes que avisarles. Te indican que no se puede pagar con tarjeta cuando ya estás sentadx. Tardan en servirte. Cuando pides por segunda vez, se les olvida. Se lo recuerdas. Tardan en servirte de nuevo. Y al final: 11€ por tres botellines de cerveza Amstel que ni siquiera están frías del todo. Atraco a mano armada. Se entiende por qué todos los bares del mercado están llenos y este tiene mesas libres.

Lamentable. Lo único que se salva son los sillones. Tardaron en atendernos una eternidad. Cuando por fin se acercan, pedimos una Cocacola y un Nestea y nos dicen que tiene que ser una Pepsi y un Lipton, y que además sólo se puede pagar en efectivo asumo que porque no tienen datáfono o se les ha averiado. Tardan otra eternidad en servirnos, y otra más en traer la cuenta. Tanto que me canso de esperar y voy a pagar dentro. Para mi sorpresa, el cliente de delante paga con tarjeta, por lo que le digo al camarero que a mí también me gustaría pagar con tarjeta, pero la dueña interviene inmediatamente para decirme que NO. Que ya me han avisado al sentarme y que son normas de la casa. Preferencia por el efectivo me dice, además con no muy buenas formas. No volveré en mi vida, y así se lo he dicho a la dueña. Se entiende por qué es el único sitio del mercado que cuando está todo lleno, tiene alguna mesa. Una lástima que no retiren la concesión a hosteleros de tan bajo nivel. Ah! Y 6,30 euros por un Lipton y una Pepsi.

Horrible lugar. Lo primero llegamos y pedimos 2 tes chai late y nos trajeron te con agua. Luego pedimos un panini y un curasan los del mercadona están mejor pero el pánico tenía huesos, yo estaba muy sorprendida porque era de jamón York y queso. Pienso que un error, ya dos lo pueden tener cualquiera asique simplemente la camarera se lo lleva. A la hora de pagar me lo cobran, y le recuerdo que no me lo comi por que me encontré huesos y me dice que es lo que hay una mujer de unos 50s rubia con acento de no ser española - doy descripción porque se negó a darme su nombre- el resto del personal al no tiene la culpa. Luego procedió a echarme de malas formas del local. Estoy de vacaciones y decidí irme, eso sí, si no queréis una mala experiencia hay mil bares/restaurantes/cafeterias increibles en Valencia.

La atención recibida ha sido lamentable. Le pedimos unas papas 3 veces a un camarero que nos acabó sacando unas olivas y a pesar de haberlas pedido en repetidas ocasiones, nunca llegó a enterarse ni a sacarlas. Después cuando pedimos la cuenta y se lo tuvimos que repetir 3 veces, nos contestó de malas maneras. Una lástima que se ofrezca esta atención en un sitio tan emblemático.

No le pongo un cero porque no se puede. Fatal atención. El camarero Adrián no controlaba quién se sentaba antes y atendía lentamente a la mesa que más cerca le pillaba o jóvencitas de su edad. Estuvimos esperando 25 minutos a ser atendidos. Cuando al final se acerca y teniendo en cuenta que el bar tenía cajas de naranjas, pedimos dos aguas de valencia. Después de 10 minutos el camarero se acerca para preguntarnos que habíamos pedido porque se le había olvidado. Y eso que lo apuntaba en una tablet!!! Cuando al final llega habían pasado 40 minutos. No nos levantamos por educación, pero bien se lo hubiera merecido porque cuando por fin nos trae la consumición era con una porquería de kas naranja!! para que quieren entonces las naranjas naturales?? y para colmo nos dice que son 16€ y cuando nos trae la cuenta figura 17€. Vamos, una timada de impresión, con mala calidad en productos y con un servicio pésimo.

No volveré más. Carisimo, por 2 cervezas Mahou nos cobraron 7,80 €, pensamos q se habían equivocado pero no. Y ni siquiera nos pusieron unas olivas o cacaos para acompañar. Además un camarero nada simpático.

Fui a tomarme un vino blanco, me lo dieron caliente y me cobraron 25 céntimos por pedirles un hielo para refrescarlo. En mi vida me habian cobrado por un hielo. Tampoco aceptan pagos con tarjeta

Henos estado 45 minutos esperando en la mesa sucia, hemos preguntado en varias ocasiones ala camarera si tal vez podíamos pedir directamente en la barra para no esperar y decía que venía. Se ha dedicado a pasearse por el bar recogiendo mesas vacias mientras nosotros esperabamos. Al final no hemos ni consumido.