Reseñas
Este lugar es sin duda el mejor en comida venezolana en Barcelona. Es un poco caro, pero vale la pena porque todo es de muy buena calidad. Los dueños y empleados son súper amables y siempre que vamos tenemos una experiencia increíble. ¡GRACIAS!
Buenísimo, me quedé con ganas de probar más platos pero son bastante grandes y queríamos dejar algo de espacio para el postre. Obligatorio probar el 3 Leches de postre. Es una auténtica fantasía. Estoy haciendo esta reseña salivando sin duda volveremos pronto.
Lugar Agradable. Buena atención. Comida venezolana recomendada, tienen pastelitos andinos carne. El pabellón criollo recomendado 100% buena relación calidad - precio. Todo muy rico, los zumos concentrados el de maracuyá lo máximo Para el postre la torta tres leches , deben probarla, deliciosa. Seguro volveremos
Toda la comida estaba riquísima, en especial el corte de carne y los postres. Los platos también son bien servidos. Hay una variedad de zumos importante. El atendimento es muy amable. Tienen mesas dentro y fuera, pero no son muchísimas y suele llenar, así que recomendo reservar. Alguna de las cosas que hemos pedido no estaban disponibles en ese día, pero eso no fue un problema y sí una razón para volver!
Se come delicioso. La sazón venezolana es muy buena. Además los hemos contratado para una comida familiar y el catering fue maravilloso. El trato es muy bueno y la comida excelente. Muy recomendable!
Buen restaurante de comida venezolana, había probado antes únicamente sus tequeños. Tienen un menú del día y también las sopas varían cada día. Buscaba un sancocho y solo había chupe de gallina y mondongo así que esta vez hemos ido dos personas y hemos pedido: unos tequeños para compartir, una cachapa para cada uno y un patacón también para compartir. Ha sido muchísima comida, no nos ha quedado espacio para el postre. Un zumo de tamarindo con una cantidad más que suficiente y bastante bueno, lo único que cambiaría es no hacerlo granizado sino como un zumo habitual. No ha sido tan agradable tomarlo como smoothie. Entre los tequeños y las cachapas pasaron poco más de 20’ y el local estaba vacío cuando llegamos; mientras esperábamos por ellas se llenó el local y veíamos cómo salía todo menos lo nuestro. El patacón que ha sido lo último ha llegado a la mesa casi 40 minutos después de habernos terminado las cachapas. Como 10’ antes de traerlo se han acercado a la mesa a comentarnos un problema con la freidora, de haberlo dicho antes lo hubiésemos cancelado. No me pareció adecuada la forma de gestionarlo. Pasamos más de 2 horas y media en ese lugar. La cuenta: 34,5€ por comensal. La atención ha sido buena desde el primer contacto, de eso no tengo queja.
Maravilloso restaurante de mi país. Tiene una carta precisa y sin miles de opciones. Solo lo bueno y lo que más gusta. Hemos comido arepas y papelón con limón. La atención es muy buena. Su dueño y el personal es muy amable. Y el lugar siempre está lleno. Con eso digo todo. Por un entrante de guacamole, cerveza, papelón y cuatro arepas, pagamos 46 euros aproximadamente. Súper bien de precio para los ingredientes de calidad que tienen. Y sus comidas para Navidad, son las mejores. Un MUST venezolano si estás por Cataluña. P.D. Puedes traer a tu perrito y la atención de Caroline es muy amable.
De los mejores sitios para comer Venezolano, solo vean las imágenes, es algo costoso pero las porciones son generosas, la masa de la cachapa se siente muy casera, el Pabellón indescriptible no vas a quedar con hambre, todo esto lo acompañamos con tequeños y un buen papelón. Atención 10/10, nadie te apura como en otros sitios de cachapas, 100% recomendado!.
Comida excelente, preparada al momento y equilibrada en cuanto a texturas y sabores. Además servida con cuidado en los detalles y el trato amabilísimo de la camarera. El lugar es agradable, bastante familiar, y acogedor. La decoración es como una casa, con muy buen gusto, sin cursilerías ni banderas por doquier. Artesanías típicas, instrumentos musicales venezolanos y mucha madera, que dan un toque muy campestre a lo contemporáneo que es todo, sin empalagar. En cuanto a la comida, lo único que no me gustó fue la torta de piña, estaba muy seca y poco esponjosa. Sin embargo, el caramelo estaba en su punto. Las arepas estaban perfectas, tostadas y el relleno justo. Es un lugar para volver, tanto por la comida como por la atención.
Wow por dónde comienzo, cómo venezolana puedo decir que este lugar es increíblemente bueno, la comida es de muy buena calidad, y los platos tienen muy buena porción. Los pastelitos andinos son hechos en casa y de verdad te recuerdan a los de Mérida. El restaurante es un poco pequeño pero el servicio es bueno. Los precios no son los más bajos pero valen 100% la pena.