Literarios

Siempre que vengo a Santiago de Compostela, visito este lugar. Buena atención, excelente ubicación y calidad de servicio. Esta última vez tuve la oportunidad de disfrutar de una QUEIMADA, me encantó, la persona que lo realiza es muy atento y lo hace espectacular. Repetiré din lugar a dudas. Lo recomiendo ampliamente

Terraza muy bien situada y agradable, pero 5,90€ por una caña de cerveza y un culín de alvariño, con unas migajas paupérrimas de patatas chips, nos pareció no menos que abusivo. Por no hablar de que te exigen el pago al momento y se quedan con el cambio sin preguntar y siquiera hacer el amago de devolverlo. Sin duda hay muchos mejores lugares en las calles de alrededor.

Entramos seis personas al bar estando llena la terraza pero habiendo mesas vacías en el interior, y directamente nos invitaron a salir diciendo que no había mesas. Cuando una de las de la terraza quedó libre, nos sentamos y el camarero salió tres veces, pasando por nuestro lado y en ningún momento nos miró ni hizo el amago de atendernos ni recoger los restos de las anteriores personas. El trato y la profesionalidad han dejado mucho que desear.

Paella buena, muy buena calidad/ precio. Lastima las patatas bravas.. salsa de bote y patatas congeladas. La terraza soleada y cómoda. Todo Ok

Horrible. El local muy bonito y muy bien ubicado. Ahora bien la atención y el producto horrible. El café era el más malo que probe en mucho tiempo. Y la atención...entramos y estuvimos 10 minutos hasta que nos atendieran un domingo cuando casi no hay gente luego de un rato nos dirijimos al señor que estaba atendiendo y le dijimos que estabamos sin atender. Nos preguntó que queríamos y cuando mi compañero le estaba diciendo lo que quería se dirigió a otra mesa porque querían saber cuanto era...osea una total falta de respeto demostrando que es más importante cobrar que atender bien. Después de eso se vuelve a dirigir a nosotros y cuando mi pareja le dice lo que quiere se va sin dejarme decirle lo que yo quería. Tuvimos que volver a llamarlo para que yo pudiera poder pedir. Con el dinero que deben de ganar aquí ya podían contratar a una buena camarera/o. Indignante la atención en un sitio así, que imagen da esto de nuestra ciudad? Edición respuesta: disculpeme pero eso no ocurrio así. En ningún momento le grité, en ningun momento dudé de lo que quería ya que ya sabiamos a que ibamos, mi compañero salió un momento a fumar ya que no nos atendian en ningun momento pasó lo que usted dijo. Y creo que cualquiera puede ver en mi perfil mis estadísticas de reseñas y por ello comprobar mi credibilidad.

Mucha suerte en la vida Mery. Vales mucho y tú mereces los mejor del mundo. Atenta, sonriente, amable, intuitiva, considerada… de las personas “bonitas” que hemos tenido el placer de conocer en Santiago. Gracias, de las “hermanas con la mamá de Murcia”

Deberían modificar el horario en internet. Supuestamente cerraban a la 01:00 de los domingos, eran las 19:00 cuando nos sentamos. Totalmente lícito que cierren a esa hora pero pasaron varias veces los camareros antes de atendernos y cuando lo hacen es para decirnos que cerraban, 10 minutos después. El problema es que había varias mesas ocupadas recién servidas. No se lleva una estrella porque la ubicación es muy buena.

Me ha encantado el lugar, cómodo acogedor en pleno centro De Santiago, justo a lado de la catedral, buenos precios a pesar de estar en un lugar con tanta historia

IMPRECINDIBLE!!! La vista desde este local al lado de la casa de la Parra y con l visión dominante de la emblemática Plaza de Quintana es una experiencia que ninguna persona que visita santiago de Compostela debiera perderse!! Por cierto unís Mojitos especialmente ricos!!! Buen contraste una bebida tan caribeña con un marco tan míticamente clásico!!!

Me ha gustado la visita a este lugar. Hemos estado un grupo de amigos a ver cómo hacen una queimada. Ha sido muy entretenido y agradable eso de la queimada. Un señor hace toda las parafernalia de la preparación, el conjuro y algo de historia sobre el tema y realiza la quema en sí. Volvería sin duda