Reseñas
Está bien para hacer una parada en el camino, algo caro... Muy bonito decorado, gran terraza. Pedí un bocadillo de queso gallego, que estaba muy rico. Pero lo encontré muy caro, 4,70€. El bocadillo no era enorme. Además no te sirven en la mesa, lo tuve que recoger yo e irme a la terraza
Me ha parecido un local especial, las pinturas medievales realizadas por el dueño le dan mucho encanto. El servicio es lento, pero cariñoso y la comida rica empanada, callos y carne asada.
Comida casera riquísima y excelente relación calidad - precio. Los dueños son súper amables, Teresa muy atenta y Alfredo dispuesto a ilustrarte con la cultura de la zona, lo cual se agradece si vas de paso en el Camino de Santiago Inglés. Además, sellan la credencial del peregrino. El lugar es espectacular, todo decorado con cuadros pintados por el dueño un auténtico museo, y también tiene un jardín enorme y aparcamiento. ¡Un 10!
Desde Betanzos veníamos famélicos y en este espectacular sitio justo al lado del camino inglés, nos dieron de comer muy muy bien. Croquetas, ensaladilla, codillo, asado y un flan casero alucinante. El trato y la atención fue de lo mejor que se puede esperar. Sin dudar, una parada más que obligada. Muchas gracias por el gran servicio!
Bien situado en el camino inglés. Decoración espectacular, con reproducción de iconografía del camino e iglesias de Betanzos. Camarera amable y servicial. Menú de 11 €, muy pobre. Y con poca elección de platos y de postres. Nos tomamos unas cañas y un refresco antes de comer. No sirvieron ningún pincho de aperitivo. Al final sumando menú y refresco resultó caro.
Un lugar para un descanso y unos bocadillos especiales y buen precioPlatos recomendadosTortilla Española
Llegamos destrozados del camino a las 16.00. Les dijimos si nos daban de comer. De comer nos dieron nos dieron a elegir cuatro platos de primero y cuatro de segundo. Al final nos cobraron a precio de carta. Ante nuestra queja, nos dijeron que nos habían dado de comer pero que ya no era hora de menú por lo que nos cayeron 90 eurazos para cuatro personas. Desde luego no les dijimos si aún tenían menú, pero al menos podrían haber avisado. Un malentendido? Cada uno que lo interprete como quiera.
Comida regular. El menú del día era entremeses o macarrones con atun. De segundo callos o tortilla de patata, postre o café 11.5 euros. Comida muy simple, muy barata y poca cantidad. Es como un plato combinado un poco caro para lo que lo es. Lo bueno, ver las imágenes de los grabados antiguos pintadas por el propio Alfredo Erias, que es muy amable y te explica lo que necesites.
Lugar muy tranquilo y acogedor. Tipo mesón con decoración medieval. Ideal para ir a comer o tomar algo sin estar en medio del barullo. Las pinturas de las paredes son súper originales y realizadas por el dueño.La comida muy rica y buena relación calidad precio. El personal muy agradable y atento. Muy recomendable.
La calidad inmejorable el lugar es muy acogedor y la comida muy buena y
