Reseñas
Pese a ser el único sentado en la barra con una camarera en frente a disposición, el servicio fue super lento, olvidando incluso lo que iba pidiendo. Aproveché que entró otra camarera en la barra para recoger algo y le pedí la caña que hacía 5 minutos ya le había pedido a su compañera. Lo mismo fue con la cuenta, tuve que pedirla tres veces a tres personas distintas para poder pagar. La tortilla estaba bien, un poco baja de sal y tardó tanto en llegar que preferí no seguir pidiendo nada. El sitio es agradable, revisaría el tema en el servicio porque vi suficientes camareros como para poder organizarse por rangos y llevar un servicio ágil y ordenado.
Nos sentamos dentro y tardaron en servirnos y en cobrarnos, y eso que no estaba muy concurrido el sitio! Nada especialmente reseñable. Pedimos cafés y croissants. Precio razonable. No me gustó demasiado, muy abigarrado todo y poco acogedor.
Tiene una interesante selección de cervezas, bebí una de las que más me gustan: Una delirium tremens y añadí un rico cachopo. Está situado en una zona muy céntrica de Madrid, tienen una coqueta terraza.
Tardan mucho en atender, la camarera es majisima pero tiene la terraza vacía y aun así es muy lenta. Han tardado 25 m en cobrarnos. Tampoco es que sea muy barato 4€ el doble de cerveza de 0,33 La comida está rica
Agradable terraza para degustar una buena cerveza, se echaba de menos una estufa, hacia mucho frío y la calle es sombríaComida: 4/5
Un clásico del barrio de Salamanca. Puedes tomar buenos pinchos. Terraza muy agradable que cierra tarde. Y de los pocos bares de la zona donde todavía se puede comprar tabaco.
Servicio aceptable tirando a normal, raciones escasas pero ricas y precios altos. Cuidado con pedir Pago de Carraovejas. Te clavan 60 euros.
Servicio de 10, camareras profesionales y comida espectacular. Recomiendo rabo de toro, callos y la hamburguesa. Perfecto.
Pésimo. El peor desayuno de mi vida. Sandwich mixto con el queso frio, uno de los dos panes no estaba tostado y el jamón cortado gordo y muy frio también. La “pulga” de salmón es un trozo de pan mal cortado con salmón de hace 3 días y queso de bote untado de aquella manera. En definitiva, no volveré y recomendaré encarecidamente a todo el mundo que no vayan. Probablemente se beneficien únicamente de que están en una zona TOP.
Mi experiencia en este lugar siempre es de lujo, por eso vuelvo y recomiendo. La comida es exquisita y el trato de primera.