Reseñas
Muy bonita playa, arena fina, mucho sitio, socorristas, duchas... etc. Bastante corriente y muchas olas. 4 estrellas por lo caro que sale aparcar, todas las inmediaciones y los parking de la misma playa son zona regulada, si vas toso el día unos 15 euros.
Playa no muy grande, preciosa, con baños públicos y bares cerca.. de mis playas favoritas.
Me encanta la playa , es muy linda , no es una playa tranquila digo de olas , está bien para surfear, para ir con niños también, pero tendrás que está más atento, hay restaurantes en vuelta , un hotel y parque para que los niños puedan jugar y bastante hierba si prefiere en vez de la arena !
Bellísima playa, muchos chiringuitos para comer y tomar unos drinks, se puede subir a un punto en la montaña para poder disfrutar las vistas .
Playa con buenas olas pero en la que hay que tener cuidado sobre todo si vas con niños. Tiene una zona con hierba para los que no les gusta la arena y bastantes opciones para comer. No es de las mejores playas de Guipúzcoa, pero con muchas opciones.
Hermosa playa, pequeña pero tiene espacio para sentarse y un mirador muy bonito
Explendida playa, tiene de todo, mar y montaña con una ruta que se puede hacer perfectamente, un poco empinada, pero merece la pena por las vistas, dos chiringuitos y unos baños públicos.
Playa con mucha zona de parking de pago. Tiene duchas, un parque infantil muy grande enfrente y restaurantes. Servicio de socorristas.
No había nadie debido al mal tiempo pero es una maravilla
Situado en la Costa Vasca, lindando con San Sebastián, Orio es un pequeño pueblo pesquero de cinco mil habitantes y cuenta con un entorno natural privilegiado. A un lado, la ría Oria se funde con el mar junto a la playa, y, a su espalda, destacan las verdes montañas costeras; es por ello, que se dice de Orio que es azul y verde. La ría, el mar y las montañas ofrecen un rico paisaje que permite largos y bellos paseos y la práctica de todo tipo de actividades: senderismo, bicicleta, la pesca en todas sus modalidades, el remo, el piragüismo, el surf, el windsurf, la natación, el parapente... Pero además de azul y verde, Orio es también amarillo. Las placas en las que se nombran sus calles son amarillas, los rótulos de muchos restaurantes y tiendas del pueblo son amarillos, hay también muchos toldos amarillos a lo largo del pueblo... Y es que el amarillo es el color de la trainera y los remeros oriotarras. El remo goza en Orio de una gran afición y de una muy larga tradición, llegando a convertir el pueblo en amarrillo.