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Buenas tapas y platillos. Buena calidad y variedad. Recinto bien decorado. Falta un poco de servicio, más rápido y amable.

Buen trato, buen ambiente y comida aceptable pero no esperes gran cantidad

Si pides huevos, no te traen pan. Entonces.......como me como los huevos, sin pan?? Otro local para tomar el pelo a los turistas. Una pena que el Paseo de Gracia en lugar de ofrecer calidad, ofrezcan sacacuartos, despluma turistas, o tomapelos. Casualmente me han ofrecido la carta menú de fin de Año por si me da por acercarme.....Desgraciadamente para ellos a mi no me volverán a ver, y éramos 9

Local con una terraza genial! Lo mejor son los platos caseros de la comida aunque el típico desayuno antes de entrar a trabajar entra muy rápido. La decoración es simplista por la zona en la que está. Tanto los que atienden como los camareros de la barra son cordiales y las pocas veces que he ido incluso se han acordado de mi. Esta muy bien para ir de forma desenfadada, pero no lo iría repitiendo demasiado, ya que al final, cada día es igual.

Las hamburguesas solo tienen buen aspecto. Su insípido gusto me hizo aburrirla antes de acabarla, estaba muy seca. El pan parecía que lo acababan de descongelar, no tenía la textura óptima. La que viene con queso de cabra que no se espere un medallón. Lo único bueno fueron las patatas fritas que acompañaban la hamburguesa. Los nachos un desastre, una sola cucharada de wakamole en un plato de nachos para compartir. una miseria. Los precios muy elevados. Hamburguesas de 10 euros, cerveza con limón 3-4 euros, nachos más de 5 euros por poca cantidad. No lo recomiendo a nadie.

Lugar aceptable, la atención deja mucho que desear el camarero no conoce la carta de los vinos su respuesta fue no puedo saber de donde son tantos vinos. Las tapas frías, unos nachos fríos. incipidos , el pulpo parecía una lámina además tostado de microondas y las patatas bravas solo tenían el nombre brava de mala. Nada recomendable.

Un local muy mono y moderno, pero que lástima de servicio. Pedí una botella de agua grande y me dijeron que no tenían, para ver como servían tres grandes en la mesa de al lado. Supongo que las botellas pequeñas dejan más beneficios. Aparte la pedí fría, y del tiempo hubiera sido hasta más fresca, obviamente sin limón o hielo en el vaso. Además los tiempos de espera son larguísimos, a pesar de estar el local medio vacío. Ni lo recomiendo ni volveré.

Desayuno de bocata caliente + café con leche por 2,25 euros en pleno Paseo de Gracia. Sólo puedo hablar de la experiencia de un desayuno, pero la verdad es que el precio es más que ajustado para estar donde está. El trato del personal fue correcto y bastante rápido. El local es agradable y tiene una sala diáfana y amplia. Además tiene terraza climatizada en la calle. Para mí, no sé si es el restaurante de mi vida pero para ir de paso no está mal.

La comida no está del todo mal pero las cantidades de algunos platos un poco escasa p. ej. la ensaladilla rusa, y la relación calidad - precio un poco desequilibrada. El servicio excelente, los camareros muy atentos y amables y el local y decoración atractivos.

Carta súper variada. Para todos los gustos