Restaurante San Francisco

Un restaurante espectacular. La comida buenísima, buenos precios, calidad y cantidad excelente. Los camareros muy eficientes y muy amables. La comunión de mi hijo salió perfecta gracias a la profesionalidad de todos sus integrantes. Gracias.

Buen Restaurante para disfrutar de platos tradicionales, elaborados con muy buena materia prima. A destacar también la amabilidad y profesionalidad de todo el personal. Fácil aparcamiento y buenas instalaciones.

Comimos allí y el trato fue genial, la comida muy buena y el precio muy económico. Volveremos seguro. Admisión de niños: Tienen menús especiales para niños Aparcamiento: Amplio y con sombra Acceso para sillas de ruedas: No hay obstáculos

Restaurante a las afueras, se está muy bien, tiene buena terraza , tiene agua por nebulosidad para el calor y por la noche se está de maravilla, también tiene castillo flotante para los niños. La comida está muy rica, bien en cantidad con respecto al precio. Merece mucho la pena ir.

Se come bien pero el alto volumen de la música impide tener una converaación normal y crea un espacio inaccesible para pequeños y personas sensibles al ruido: superiores a 78db, con ruidos altoa de 80-90 db de volumen, medidos con sonómetro. A modo de comparación, una conversación normal tiene un volumen de 50 - 60 db. A partir de 75db la exposición prolongada a un ruiso puedo producir daños al oído. A partir de 80db se recomienda usar protectores auditivos. Yo tuve que usar unos protectorea profesionales de música de -27db para poder cenar. Mi hije de 1 año y medio se sobreestimuló y no comió. Nos tuvimos que ir mucho antes de lo que nos habría gustado.

El A/A regular. Pimientos del piquillo exquisito.

La comida muy buena, el precio muy bien y el trato muy correcto. Lo único negativo al menos en este día nuestro, doce de octubre, que servían muy lentamente. Entramos a las 14:15 y salimos a las 17:00. Reservamos por thefork y nos dijeron que no tenían noticia de estar en esa web pero nos dieron una mesa porque eramos tres.

Restaurante a las afueras de la ciudad donde puedes estar tranquilamente con los niños. Además ponen un castillo en el exterior. Relación calidad-precio buena

Buen local para tomar unas cañas o un buen vino en buena compañía, además te ponen unas tapas para acompañar, cortesía de la casa. Muy recomendable.

Cocido, migas y cochinillo impresionantes Los chuletones una pasada