A Lareira do Manuel

Salimos del teatro Olympia y buscamos sitio en una terraza cercana. Sólamente había sitio en este bar, los demás llenos. Pedimos dos cervezas 4€ cada una, calientes y desventadas. Pedimos la carta para picar algo. Nos traen la carta, grasosa por cierto y pedimos albóndigas de bacalao y costillas adobadas. Nos traen albóndigas congeladas que solo llevan bechamel, sin gusto a nada. Se lo decimos a la señora, que nos sirve y dice que lo pregunta en la cocina. Ninguna respuesta. Nos trae las costillas, caldosas, recalentadas y seguramente guisadas hace algún dia por su gusto avinagrado. Se lo decimos y nos dice que el gusto es porque llevan chumichurri??? El pan de hace dos dias. Se queda el plato de costillas entero y nos cobran todo. Pago con tarjeta y dicen que que se les ha estropeado??? Local sucio en el que hemos caido, por no fijarnos, culpa nuestra claro. No se os ocurre acercaos, los cuatro que dicen que buenísimo deben ser clientes falsos o amigos. Trato a los clientes despreciable. En toda mi vida me ha pasado algo parecido. Huid y cuidado los extranjeros. Tourists run away from the bar. Expensive and bad, vary, vary bad

Pedimos una empanada gallega para compartir, estaba buenísima, era de pisto con atún 6€. El camarero fue mas que amable. Luego pedimos dos platos 10€ unidad de paella de marisco, desagradable sorpresa, cada plato tenia un distinto tono de amarillo, además que solo contenía mejillones pequeños y gambas peladas. Solo mereció la pena por la empanada, el arroz bastante soso y no era del día aunque nos dijeron que si.

Restaurante de comida gallega de mucha calidad en la calle Quart en pleno casco antiguo. Muy recomendable.

Queríamos comer pese a las notas leídas pero nos echamos para tras al ver el tamaño de las cañas a 1.40e. La atención ha sido correcta y nos han traído cacahuetes con las cervezas, que siempre se agradece.

Un camarero guapo, nos animo a entrar en este restaurante después de una mascletá. Una de las peores experiencias culinarias de mi vida. De los cuatro que fuimos, ninguno se tomó el menú a gusto. A mí me pusieron un vino picado, un arroz al horno pasado y un estofado de ciervo de dudosa calidad. Nada recomendable

De los mejores entrecots que he probado! Sería una pena ir a Valencia y no probar esta gastronomía gallega

Nunca jamás... Un mal vino por 3.50 y una tapa de mini empanadillas de aire refritas.

Es un local muy agradable, en una calle peatonal tranquila que comunica la Calle Barón de Cárcer con la Calle San Vicente Mártir. El trato es muy amable y esmerado, la comida está buena y los precios son razonables para la calidad que se sirve y para la ubicación del local, muy céntrico y en una zona muy codiciada.

Comida muy rica y típica gallega. La atención muy amable. No le pongo un cinco porque en los postres, salvo el flan, pincha pero, ¡Volveré para ver si le subo la última estrella!

Todo muy bueno sea la atención que las tapas que comimos. Cervezas frescas. Me gustó mucho. Volveré seguro.