Reseñas
No puedo poner 0 estrellas porque es imposible, pero es lo que se merece. Debido a que tenía que acudir al teatro Apolo, acudí a desayunar en la terraza de este sitio. Me pedí café con leche y tostada de mantequilla y mermelada. Cuando después de mucho minutos me traen la tostada y untar la mantequilla me percato de que huele mal, miro la fecha de caducidad y con sorpresa miro que la fecha de caducidad es de abril del 2018, esto ha sido el día 10 de junio. Solicito el cambio y no hubo ningún problema, me la cambian. Quien me acompaña pide lo mismo, pero con aceite y tomate, también con sorpresa comprobamos que la botella de aceite esta rellena manualmente. Al pagar solicito hablar con el responsable, éste no se encuentra y con la camarera le hago ver las dos situaciones desagradables, una la mantequilla caducada y otra le reposición ilegal del aceite en la botella. Ante la poca importancia que le ha dado al asunto, decidí formular una hoja de reclamación con la esperanza que sanidad se pase por allí y ponga las cosas en orden, ojalá.....cruzo los dedos.
Lo que dicen que son bravas, jajajaja. El ketchup hacendado con Tabasco mejorable. Orientado al turista que no sabe que come. Por cierto las paellas congeladas jajajaja, me parto. No recomendable.
Conocí este sitio ayer y no me impresionó demasiado. 3,30 euros por una copa de vino bastante normalito... yo diría que es un precio demasiado caro. Además el lugar es especialmente bonito ni agradable: las luces no son cálidas, los colores tampoco me parecen bien escogidos. En fin, en otra ocasión optaré por conocer algún otro lugar de la zona.
El sitio no está mal, precio del menú 12€. No es caro para la zona y la comida es aceptable. Eso sí, a pesar de tener varios carteles anunciando 5€ de descuento al pagar con Zapper, la camarera nos dijo que no se podía porque estaba desactivado.
La calidas de la comida es regular, lo cual es lo que puedes esperara de una cafetería informal. Pero los precios no son acordes. Poca variedad y muy caro para la calidad que ponen. El ambiente delo local muy poco acogedor. Las camareras amables. La carta tiene muy pocas opcioenes, es un modelo cafetería con paellas para los turistas que estén por ahí.
Bueno pues estaba regular algo caro un poco lentos y muy despistados , pero al estar enfrente del teatro Apolo nos vino bien
El trato más pésimo que recibía desde hacía mucho tiempo. Pedí un desayuno de la carta, entre las bebidas estaba el colacao a elegir y yo elegí ese. Cuando voy a pagar me dice la camarera rubia que es más del importe que pone en la carta. Que el colacao no está incluido. Le digo que en la carta si viene y me dice que es q estan confundidas...eso si...la carta está por todos los lados del bar. Además la chica lejos de pedir disculpas, me dice que no me queje que debería cobrar el servicio de llevar a mesa... Y le dije que el servicio de llevar a mesa lo habíamos realizado nosotros mismos. Una vergüenza. No volveré.
La calidad es mala. El precio muy caro .8 minicroquetas de harina 8€. La salsa brava casera, de bote. La atención rápida y amable.
El sitio genial, con bastante amplitud en el local, la atención muy buena, los camareros detallistas, y amables. La comida buenísima, sin duda las mejores fajitas que he probado, geniales. Repetiré sin dudarlo.
Las raciones son malas y escasas, las coqretas son malísimas, son más propias de un bareto de barrio malo, ceno muchos sábados y muchas veces de raciones y no he visto nunca un sitio tan pésimo, deberían de cambiar el nombre del bar, por no te comas nada