Reseñas
Mi experiencia en el restaurante Cappuccino de Puerto de Pollença fue realmente decepcionante. Aunque la ubicación y las vistas de la bahía son lo único positivo que puedo mencionar, no es suficiente para justificar una visita a este lugar. A pesar de que el restaurante suele estar poco concurrido, los precios son desorbitados. Por ejemplo, una simple copa de Aperol cuesta la increíble cantidad de 12,50€, mientras que el precio de la botella en un supermercado es de solo 10,20€. Es evidente que los precios están inflados para sacar provecho de la ubicación del restaurante. Además, aunque el personal es muy amable y bien uniformado, esto no compensa la mala calidad de la comida y el servicio deficiente. Los platos eran insípidos y mal preparados, y la espera para que nos sirvieran fue excesivamente larga. En definitiva, no recomiendo en absoluto este restaurante. Si buscas buena comida y servicio, hay muchas otras opciones en Puerto de Pollença que ofrecen precios más razonables y una experiencia mucho más satisfactoria.
Maravillosa ubicación, ubicado en los bajos de un precioso hotel, carta correcta, muy buena atención, precio algo elevado, recomendable
Las reseñas en general no son muy buenas, sin embargo tuve una grata experiencia. Todos muy atentos. Sin embargo, no entiendo como los empleados en pleno verano se vean obligados a usar como uniforme camisa de manga larga.
Lugar tranquilo. Atención espectacular igual que la comida Muy buen ambienteComida: 5/5
Hermoso lugar,excelente comida y atención.Precios acordes con el lugar,no es barato pero vale la pena.
Decepcionante. La situación al lado del mar es muy buena y el sitio está decorado muy bonito. El ambiente parece propicio para una cena estupenda, pero nada que ver con la realidad. Me cobraron 20€ por una ensalada de burrata, la cual aún siendo burrata está por encima de su precio, pero era una mozzarela son más, como la de cualquier supermercado. La botella de agua pequeña fueron 4€. Me pareció una estará vender como burrata mozarella, pero debe ser igual decepción toda la carta…
Terraza agradable en Puerto Pollença, justo pegada al mar en el paseo marítimo. Un poco cara para la oferta que tienen aunque en la media de lo que tiene alrededor.
Muy buen café y un sitio privilegiado para tomarlo con vistas al Puerto de Pollensa
Buen ambiente y lugar acogedor. Precios caros y la puerta de la entrada no dejaba de golpear cada vez que salían los camareros ya que hacía viento y no ponían cuidado a la hora de cerrarla. Decidimos irnos por lo pesado que se hicieron los portazos cada vez que abrían. Una pena!
Un lugar encantador. Personal muy amable y rápido. Los precios no son nada caros.