Reseñas
Recuerdos entrañables de juventud. Nací en esta finca y estuve 25años. Tenían unas anchoas riquísimas que entraban solas con una cerveza. Han pasado 50años y siguen en activo. Felicidades
Bienvenidos al bar con los camareros más estúpidos de Barcelona. Después de quince años siguen igual de bordes y mal educados. Una lástima porque el local promete. Podría entrar gente o animales que les daría absolutamente igual. Después de preguntar 3 veces donde tenemos que pedir el camarero de corte taza aún no nos puede responder, no sabe, no contesta, nada de nada.
Emblemático local del centro de la ciudad. Un ambiente familiar donde siempre puedes encontrar a gente conocida. Los camareros son encantadores y si vas con frecuencia te cuidan mucho. Muy recomendable para cualquier tipo de situación, cita o quedada. Un 10 de 10!
Sitio ideal para tomar algo tranquilamente, ambiente único de misterio y años pasados. Vino, vermut o cerveza. Hay que ir y dejar envolverte, uno de los bares más antiguos. El personal encantador!
Si ha sobrevivo al paso del tiempo durante 162 años por algo será. Un clásico desde 1860 que no podemos dejar que se convierta en una franquicia típica y sin alma de las que hay ahora. Cuidemos los clásicos y mantengamos la esencia de las ciudades antes de que sea tarde.
Típico bar con ambiente de principio de siglo, decadente y decrépito. No soy fan.
Genial, acojedor, histórico, magnifico vermut, genial carta de licores y vinos, un lugar para beberse la historia de Barcelona.
No está cómo lo conocí
Una casa como las de antes, con buen ambiente, música, cómoda. Perfecta para na noche de tragos.
La Casa Almirall respira y refleja modernismo en sus ventanas, cristales y carteles. La visita vale por el ambiente, por la oferta de whiskies y gins y por el tradicionalísimo vermut Perucci, que se vende desde que el bar fue abierto. La fama hace que el bar esté siempre lleno. Entonces, pida una gin tónica y disfrute!