Chellanatura

Estuvimos 2 noches en furgoneta camper. Qué lugar más tranquilo para desconectar y encontrar toda la paz del mundo que quieras. Parcelas grandes, privacidad porque no están todas pegadas, silencio absoluto por la tarde noche para dormir y descansar a tope, ... Una cosa que nos gustó es la proximidad para hacer rutas de senderismo y visitar las poblaciones cercanas, que son preciosas. Mi mujer y yo dejábamos la camper en Chellanatura y nos íbamos de caminata cada mañana. Un día estuvimos en Chella, otro en Bolbaite y otro en Anna. Bastantes kilómetros para las piernas pero muy llevaderos, gracias en parte a que todo lo que descubríamos a cada paso, era precioso. Louisa nos atendió muy bien y en un quasi perfecto español. Nos facilitó mucho el check-in y check-out, y aunque no tuvimos casi oportunidad de hablar con ella, lo poco que la conocimos nos dejó la impresión de que era una estupenda persona con la que empatizamos en muy poco tiempo y que cuidaba como nadie de la hospitalidad de aquel entrañable lugar que ella mismo ha creado ;

Precioso paraje y formidable camping para pasar unos días en completa tranquilidad y unido a la naturaleza. Sus animalitos...perros, un caballo y dos cabras es lo mejor para desconectar. También puedes hacer rutas de senderismo y BTT preciosas.

Un sitio agradable y tranquilo, muy natural, sin parcelar, casi como estar por libre en plena naturaleza. Muchas gracias Louisa.

Lugar tranquilo, muy buena atención por parte de los dueños y todo muy limpio y cuidado.

Maravilloso sitio. Muy tranquilo. Louisa muy amable. Aseos limpios y precio muy bueno. Volveremos!!

Solo estuvimos un día y es de una tranquilidad total, nos atendieron de maravilla, todo súper limpio, solo echamos en falta que además de dos fregaderos hubieran lavabos independientes, por lo demás chapó !!

És un lugar super tranquilo.La casa cómoda y limpia.Piscina y barbacoa.Espacio para jugar los niños.El trato de los dueños muy amable y correcto.Recomendable 100 %.

Semana muy tranquila y agradable en una casa, que al segundo día te sentías como en tu propia casa, muy recomendable.