Reseñas
La vida está muy cara, y seguro que en otras mil cosas estará bien este sitio, pero no puedes acordarte de hacer tortilla a las casi 14:00h, ni deberías cobrar 3,50€ por un sándwich mixto con las rebanadas más finas del súper lo mismo con la loncha de york y el queso más aceitoso del mercado. El trato súper bien, eso sí, pero con la competencia de la zona pues en fin.
Un sitio muy agradable con unas tapas grandes y ricas. Muy buena opción en los alrededores de la estación de Atocha, huyendo de sitios caros y turísticos. Todo lo que veis en las fotos son aperitivos gratis. Las auténticas tapas madrileñas.
Local amplio y moderno. Buena atención al cliente. Dispone de terraza en la calle.
Fatal, muy maleducada la camarera y no nos sirve ni cubiertos ni la carta. A los 45 minutos con solo la botella de agua en la mesa, nos dice q la comida tardará mucho. Le preguntamos qué cuanto tardará, dice que va a preguntarlo al jefe, y en 15 minutos no recibimos respuesta. Comida regular. FATAL
Muy buena atención, muy simpática y atenta la camarera. Con cada cerveza una tapa gratis.
Hemos esperado mucho y hemos comido pésimo. Las patatas de uno de los platos estaban fritas como dos veces, duras como piedra. Otras patatas de otro plato estaban recién hechas pero lo que le acompañaba estaba incomible. Demasiado aceite en todo. El camarero era amable pero por la cocina no volveremos.
Me da un zumo rancio que huele a balleta usada y encima se indigna la señora porque le digo que está malo, muy malas formas. No creo que vuelva.Espero que el Camero que es muy amable se cambie de trabajo porque ahí está perdiendo vidaComida: 1/5
Después de más de una hora esperando la comida, habiéndose vaciado el local, nos dicen que ni han pasado a cocina el pedido, no volveremosComida: 1/5
Hemos ido 4 personas esta tarde al local, no funcionaba el aire acondicionado. No obstante el señor nos pone una mesa al lado de unos cubos de basura, la comida tardó muchísimo, unos huevos rotos con jamón, bañados en aceite, un secreto que tenia un olor malísimo, le pedimos que nos lo retire y al rato sale una señora con una Carne en una bandeja diciéndonos que nos había puesto el bueno. La Carme tenía un color espantoso. Pedimos una paella, y fue lo único que al menos se podía medio comer. En fin, una experiencia muy mala, y el trato fue un desastre. No nos pidió ni disculpas.
Siempre bien atendido y saboreando los deliciosos platos ofrecidos.