Reseñas
Mi rosco de Reyes siempre en Dulces Artesanos, desde hace 40 años siguen siendo los mejores, los hay de todas clases, tienen tres tamaños y los hay de nata, trufa, cidra, crema y sin relleno sin necesitad de encargo y los hacen sin lactosa y sin gluten por encargo, los tamaños estupendos, desde el pequeño para 8 raciones, medianos 12 raciones y el grande ya ni os cuento, fiel siempre a la calidad y buen precio.
Pasteles de calidad y de toda la vida. Muy ricas sus pastas para el té, y muy recomendable. Atención excelente y muy amable.
Se ha convertido en nuestra pastelería de tartas de cabecera, desde hace años, todas las tartas de cumpleaños en casa se compran allí y es garantía de éxito. La que más nos gusta es la tarta de San Marcos con tocino de cielo que está exquisita.
Establecimiento con muchas años de experiencia y en el barrio de Bami. Pastelería muy rica y realizada casi en el momento. Variedad de tartas y te la hacen a tu gusto. También puedes tomar un café y saborear cualquier pastel de su vitrina.
Tartas riquísimas con nata de verdad, también tienen otras variedades,
Muy bueno, les compramos unos pastelitos sin gluten deliciosos, llevan años trabajando y se nota la experiencia, sin duda volveremos.
Me encanta, los pasteles sin gluten están buenísimos , las tartas están riquísimas mi favorita la de San Marco y precio esta muy muy muy muy bien en comparación con otras pastelerías sin gluten.
El trato recibido por el personal es exquisito y la amabilidad y atención infinita, pero el local no acompaña ni a los productos ni a sus trabajadores. Apenas hay espacio para poder disfrutar de los distintos pasteles que se ofrecen y en cuanto entran unos pocos clientes la apariencia de bullicio consiguen que no quieras entrar...lo cual es un grave error.
Confitería de toda la vida. Dulces exquisitos y tartas aptas para intolerancias diabéticos y gluten. Todos los dulces tienen un aspecto de estar riquisimas, especialmente los rosas con hojaldre y crema pastelera, sin comentarios...
He comprado hoy una bandeja de dulces variados y una decepción. Un cono de crema rancio, un croisant sin matequilla y una tarta de manzana que parece descongelada y que sabe a agua.