El Bitxo

Local muy chulo, tranquilo y muy bien decorado. Es pequeñito. El servicio muy atento. Ideal para tomar unas tapas con un buen vino, también se puede cenar. A mí me ha gustado mucho, intentaré repetir.

Sitio muy curioso para hacer una paradita y tomarte un buen vermut acompañada de una rica tapa. Muy cerquita del Palau de la música.

Tapas originales en un edificio con mucha solera, y decorado con originalidad. Excelente el paté de almendras con pimientos rojos asados y la Ensaladilla de pollo con garbanzos, sabores originales y poco vistos. Para obtener el cinco solo falta que la dueña sea un poco más afectuosa con sus clientes

No dejéis de ir a conocer a Benedikte. Es sencillamente maravillosa.Comida: 5/5

Lo tuve pendiente durante mucho tiempo y la verdad todo fue bastante lamentable. Aunque estuviera medio vacío tuvimos que sentarnos en la barra, la birra del tirador no estaba fría, el trato muy mejorable y, aparentemente, el datáfono no funcionaba así que solo podías pagar en efectivo, sin previo aviso.

Recomendable 100%. Comida muy sabrosa. Trato personal y cercano. Local acogedor. La crítica negativa debe de ser de otro bar, porque no se corresponde a El Bitxo. Hay todo tipo de panes, y la carta está especializada en pescados marinados, aunque hay variedad de platos, originales y sabrosos. Destacar el buen trato por parte del dueño, te deja probar los vinos antes de pedirlos y te recomienda si has pedido demasiada comida. En resumen, una experiencia muy recomendable.

Ayer a mediodia fuimos a comer porque estavamos trabajando por esa zona. La pizza buenísima, de 10. Calidad y buen precio en el menu y buen servicio. Recomendable al 100%

Es vergonzoso que pidas una ración de quesos variados y no te ofrezcan ni pan ni nada, lo tuvimos que pagar aparte, por supuesto. Pedí una segunda caña y la camarera me pidió mi vaso para rellenarlo con la excusa de que de esos tenía pocos a pesar de que en nuestra mesa había otros 3 sucios que podría haber lavado y ofrecido la cerveza en condiciones. Mi amiga tuvo que pedir 2 veces una copa de vino y aún así, la camarera optó por salir a saludar a un amigo a la calle en vez de atender al cliente. Para el colmo, al pedir la cuenta que fue para mí demasiado cara, nos metió prisa para pagar para sentar a otro grupo. No lo recomiendo para nada.

Local muy auténtico con unas patatas bravas fantásticas!

Un pequeño lugar con encanto. Todo lo que hemos pedido estaba muy bueno. La dueña muy simpática. Un poco lentos en servir y el servicio wc necesitaría alguna mejora.