Reseñas
Un lugar muy agradable en el que estar y comer. Tienen una amplia variedad de raciones y tapas. Pedimos unas berenjenas, muy ricas, los callos a la madrileña excepcionales, unas alcachofas y, unas croquetas de jamón que eran más bien croquetones como los que hacía mi abuela. Nos quedamos con ganas de probar el rabo de toro, lo pidieron en la mesa de al lado y tenía muy buena pinta. Volveremos sin duda.
Toda la vida comiendo en la trucha y que gusto da volver. Comida sana y de máxima calidad a un precio razonable. Deberían volver a poner en la carta la ensalada de endivias.
Maravilloso lugar para comer y cenar, comida riquísima, especialmente el rato de toro. Buen precio. Muy agradecidos con el trato, el personal es muy atento e inmejorable. Fuimos por nuestras bodas de plata y ahora somos cliente habitual. 100% recomendable en pleno centro de Madrid, pegado a la plaza de Santa Ana. Una maravilla. Luis y Begoña.
Sitio correcto pero caro. 9,90€ por un tanqueray tónica en terraza. Sin más, una copa como en cualquier otro sitio. El ambiente algo raro entre camareros, nos cobraron 2 copas de más 8 en vez de 6 y al decirlo se empezaron a tirar la pelota entre ellos echándose culpas y reprochando su forma de trabajar. Estuvimos un rato hasta aclarar el malentendido y aún así parecía que pensaban que les queríamos engañar... Para esto merece la pena subir a la terraza que está mas cerca, seguro que las copas son más caras pero tendrán valor añadido de vistas o servicio.
Fui con mi pareja a tomar unas raciones después del teatro, y me encantó.El había estado hace muchísimos años y recordaba las patitas de calamar, la berbena de ahumados.. y le supo como él recordaba.Muy bien atendido y ambiente súper agradable.Comida: 5/5
Llegue de casualidad y me enamore, para empezar la atención es más que excelente, y las tapas y los platos se nota ampliamente el amor que le ponen en prepararlos, un lujo de lugar, es más no pierda tiempo y hagan la prueba les aseguro que no se van a arrepentir. Me olvidaba, la tarta de manzana es un antes y un después.
desde hace mas de 30 años conozco el.mejor bar de tapas de.todo madrid. deliciosa berenjerñna, cazon y los.mejores champiñones al ajillo de la historia. hace años estaba a rebosar, ahora hay poca gente, mejor.
Todo un clásico de Madrid… venido a menos. Conozco este local desde hace más de 30 años y su verbena de ahumados era indispensable en cualquier jornada de tapeo que se precie. Hasta hoy. Han tardado en servir cada ración media hora y eso que el local estaba casi vacío, con el desorden además de servir antes a otros que llegaron después: el clásico del mal servicio. Al final tuvimos que levantarnos sin acabar de comer para poder terminar en el bar de al lado: El Lacón por cierto, era pedir y nos servían en menos de un minuto: profesionales
Estupendo sitio, muy auténtico, de los que quedan pocos ya. Ambiente agradable y personal muy simpáticoComida: 5/5
Un clásico. Platos bien cocinados, la verbena de ahumados magnífica, los frit muy bien igual que la planche. La atención magnífica a pesar de que son pocos . La pega, la aglomeración de personas y mesas demasiado juntas. Por lo demás magnifico.Comida: 5/5