Gioia

Un restaurante con una propuesta original y unos sabores potentes y agradables. El trato excelente en un lugar acogedor, nos facilitó el disfrute con sus propuestas acertadas, incluyendo la buena elección el vino. El precio, acomodado a la calidad y presentación imaginativa. El buen sitio con decoración exquisita, acogedora y envolvente, que te relaja mientras vas disfrutando de la riqueza y variedad en formas y sabores. Todo favorece una buena velada con amigos. Nuestro agradecimiento a esa cocina tan fantástica y al magnífico trato recibido. Recomendable su visita, no defraudará.

Auténtico italiano escondido en el corazón de Madrid. Cocina italiana de vanguardia espectacular. Es un local muy acogedor, con personal muy amable y todos los detalles muy cuidados. Te transporta a Italia. Mi plato favorito las flores de calabacín. Los precios pueden parecer algo caros pero merece totalmente la pena. Repetiremos.

Muy buen trato por parte de los camareros, atentos en todo momento y explicando los platos a la perfección. La comida estaba riquísima. Lo que más nos gustó fue la pasta que tenía un sabor muy intenso y riquísimo, además el queso era fuerte y le daba un contraste exquisito. De postres, el mejor fue la rosa que era helado de pistacho...no tengo que decir más . 100% recomendable, salimos encantados y conocimos al cocinero!!! Un menú increíble.

Un italiano con su máxima esencia! Puedes elegir menú cerrado o a la carta. Sigue las recomendaciones del personal y mo te pierdas los platos que llevan trufa y los de pasta fresca, sin olvidar dejar sitio para el postre. Nosotros empezamos con una ostra, deliciosa!

Cocina espectacular! Combina estilos y productos de Italia, Japón, Francia y España. Nosotros probamos el menú degustación de 65€/per. con el maridaje +45€/per. Pero también se puede pedir una botella de vino y ajustar un poco el precio. No son precios para ir todos los días, pero es perfecto para un día especial. Excelente atención de todo el servicio, que además te explican cada plato y vino que vas tomando.

Sencillamente espectacular. Un local pequeño, decorado con excelente gusto, atención impecable, personal atento, con inteligencia, servicial pero sin estar encima, dejando al cliente que disfrute de la cena. La comida es maravillosa, cenamos y bebimos con alta calidad. Platos elaborados con productos nobles, tradicionales y un toque de innovación. Vajilla, y cristalería 10 puntos. Toda una sensación al paladar y especialmente dedicado a sibaritas.

La mejor decisión que tomé en toda mi estancia en Madrid: el menú degustación de Gioa. Relación calidad precio perfecta, lo cual invita a un retorno más pronto que tarde. Algunos bocados memorables que permanecerán en mi recuerdo para siempre. La mejor pasta con huevo y trufa que he comido en mi vida y he tenido la suerte de haber visitado muchísimas veces Italia desde mi infancia. Salí con ganas de volver a ir con gente para que supieran lo que se estaban perdiendo. El Wagyu estupendamente tratado te deja con ganas de más, la ostra buenísima, la naranja muy apropiada y el postre de pistacho, una sorpresa. Todo perfectamente ejecutado, con sentido. No le pude poner pegas a la comida.

Wow! 5 estrellas es poco para calificar la experiencia que hemos tenido! Imprescindible el menú degustación. La influencia asiática muy bien ejecutada, lo justo y necesario. Los spaghetti al tartufo tienen un lugar en el cielo. Gracias al equipo por la atención y el servicio. Esperamos volver pronto.

Restaurante italiano con maneras de estrella Michelin. Nosotros probamos la carta, con platos excelentes, recomiendo especialmente las joyitas, pasta rellena de gambón con tartar de salmón y huevas. Excelente, y un sabor peculiar y refrescante. Pedimos vino por copa, nos ofrecieron un vino blanco italiano exquisito. Los postres muy originales y, sobretodo, no se hacían pesados. La atención del personal muy buena, como única pega, no adaptaron el menú a uno de los comensales que no come carne, pero en carta si que nos permitieron modificar un par de platos que contenían guanciale, sirviéndolo a parte.

Una experiencia gastronómica muy buena, donde puedes degustar auténtica comida italiana vanguardista, que se vio ligeramente empañada por un servicio bastante regular… Probablemente esa sea la razón por la que no volveríamos. Merece más la pena pedir platos de la carta que el menú degustación, ya que este tiene un precio muy elevado para lo que ofrece. Al local le falla mucho la iluminación, con demasiada claridad y sin foco a la mesa y los platos. Para disgusto final, alguien se llevo mi paraguas ‍.