Hermanos Cabrera

Gran menú casero. Comida muy bien elaborada y camarero súper amable.

Buen trato y excelente platos combinados por ta solo 8 euros. Quizá un poco viejo el lugar, pero muy atentos y amables. Repetire

Un poco sucio por dentro, pero tiene una buena distribución, buen ambiente y la zona de fuera, terraza, la han dejado bastante bonita con luces, plantas, sombrillas etc. El camarero muy atento y agradable. Y la comida estaba bastante bien, aunque me habría gustado algo más de detalle en los platos.

No le pongo menos porque no hay opción,he venido bastantes veces y siempre me había ido satisfecha,ahora hace tiempo que no venía y puedo decir que no volveré,¡NEFASTO! ,hemos pedido el menú del día,primero arroz a la cubana,arroz duro,un huevo y una "manchita" de tomate he tenido que pedir un "poquito más y aún con ello se me atragantado,en qué me he visto de no vomitar,de segundo lacón a la gallega,una loncha de fiambre y unas patatas con las que puedes agredir a tu peor enemigo ,más duras que en crudo,un mérito conseguir sacarlas así ,de postre he pedido un flan que creo que será difícil que esté duro porque no quiero imaginarme cómo estará el arroz con leche,mi hermano no se ha arriesgado y ha pedido un café.Asi durará menos que un caramelo a la puerta de un colegio,yo NO VOLVERÉ

No está mal , hace unos años estaba mejor.Tuvimos mucho frio comiendo ya que aunque tenía un pequeño calefactor de pared. Pero la puerta estaba abierta para la entrada y salida del camarero. La sopa de pescado regular y el secreto al horno pasable.las natillas de la casa extremadamente bloque

Se trata de un bar tradicional que tiene dos terrazas una terraza cerrada y otra terraza abierta con mesas ideal para disfrutar de tu consumición mientras el sol madrileño te da. Pedimos dos coca-colas y nos trajeron un platito de patatas fritas y dos pinchos, disponen de servicio a mesa. hemos pedido cuatro coca colas, una ración de boquerones fritos muy generosa, una ensaladilla rusa muy rica, y una ración de croquetas caseras de jamón que tenían aspecto de ser más bien industriales. El precio total fueron 32 €.

Es lo peor que comí en mi vida el revuelto de huevos con setas es como si alguien vómito en el plaaato y las setas casi crudas el intercot pasado y pedí en su punto el café asqueroso mi hija pedido espaguetis que estaba bueno los filetes con sabor a agrio y el bocadillo los filetes casi crudos no volveré más si podría darle cero estrellas lo daria

Comimos unas patatas rotas con jamón que no nos gustaron,la patata de bolsa y el jamón el más barato que hay.un tinto de verano que tenía más refresco que vino.

Una chanchera, la comida se quedó en la mesa y la bebida porque eran tercios en botella si no se queda allí también. No me creo ni una de las reseñas de 5 simplemente porque es imposible que alguien puntue tan generosamente.

Madre mía!. Miré la crítica en Internet, mientras que estaba desayunando. El mejor momento, fue el de salir... Sitio pequeño, poco agradable y guarro. Poca profesionalidad. La tortilla, daba miedo pedirla. Pedí un montado de lomo, que al menos, no me sentó mal. Afortunadamente, sobreviví al desayuno. Deseando salir, por patas.