Reseñas
Es un sitio increíble, acogedor y se cocina súper rico. Voy allí durante 3 años y todavía tienen con que sorprender. Gente muy amable y la comida servida casi como en restaurante de Michelin. Que tengáis la prosperidad hasta siempre!
Excelente: los sabores de los platos, la atención de los dos camareros, el precio del menú. Hemos comido hoy domingo por 14,90€/persona, con la bebida incluida. De primero, una focaccia con chanfaina muy buena y unos mejillones exquisitos hervidos con cilantro y apio. De segundo, una carne de ternera en salsa para no dejar de mojar las riquísimas patatas que la acompañaban. Una nota de agradecimiento, mi hijo había pedido de segundo pimientos rellenos y, como las patatas estaban de muerte, se comió todas las que iban en mi plato y el camarero al verlo, me trajo un plato entero de patatas para que no me faltaran, gracias!!! ¿Y qué decir de los postres? hubiera repetido y repetido la excelente tarta de lima. El tiramisú muy bueno y lo que menos gustó, la crema inglesa, es que lo que sea inglés ... Repetiremos otro día !!!
Un restaurante perfecto para ir en bicicleta, ya que hay un pequeño callejón donde las puedes apoyar y vigilar en todo momento! MENÚ Puedes elegir un plato o dos, son platos variados bastante elaborados, tienen un toque árabe que nos encantó. Los postres están increíbles!! En cuanto a la cantidad, es la justa, no pasas hambre, pero tampoco sales hinchado. AMBIENTE Le doy un 10, un sitio muy tranquilo, los camareros muy amables, el trato excelente... nos reservaron la terraza para poder vigilar las bicicletas. Dentro el local está impecable! Un ambiente selecto, ideal para ir pocos o con pareja. Creo que es un sitio estupendo para ir con o sin bicicleta. Merece la pena, sin duda repetiremos Comida vegetariana: Hay platos veganos Acceso para sillas de ruedas: Es planta baja
Menú estupendo con muchos platos a elegir. Muy buen trato y la terraza sombreada y tranquila. Muy recomendable
Aconsejo reservar ya que es un lugar muy pequeño. Comida riquísima. Buen servicio, rápido y muy amables. Para repetir sin duda.
Pues no me gustó la verdad. Fuimos a celebrar un cumpleaños y ninguno de los 10 salimos satisfechos. Un menú de noche tipo degustación que no nos convenció. A veces menos es más. La cremita de calabacín todavía no sé a qué sabe. Una lonchitas de melón con una fina capa de jamón. Los mejillones no sabían a nada. Las bravas insulsas y el carpaccio de atún pues simplón. Lo único positivo fue el postre, una tarta Pavlova que supongo que no hacen ellos. No entiendo cómo es que está tan bien valorado.
Un restaurante con un menú de mediodía muy bueno con una calidad precio inmejorable. Mucho sabor , los platos muy diversos . Juan Carlos , el camarero es un encanto de persona . Eso si , reserva antes de ir , ya que las plazas son limitadas . En verano , tienen una terraza súper agréable .
La comida muy buena, la terraza con separación entre mesas y la atención de los camareros genial. Los precios correctos con disponibilidad de coger uno, dos o tres platos. Lo única pega a destacar sería que uno de los camareros el cual ha sido muy amable y atento no se ha puesto la mascarilla en todo el rato que hemos estado, los otros si la llevaban.
Cómo Restaurante, nada del otro mundo, eso sí la focacca impresionante, buenísima. La isla esa, no me ha gustado mucho. El trato excelentísimo. Después los pimientos del piquillos muy sabrosos.
Todo buenísimo en general pero destaca la amabilidad y simpatía del personal. La comida está muy buena y tienen varias opciones de menú y todos a precios muy adecuados. Si volvemos por Sitges, volveremos sin duda.