Reseñas
La estancia en el restaurante italiano fue muy agradable. El ambiente era acogedor y la atención del personal fue excelente. Los platos que probé estuvieron muy bien preparados y tenían una presentación impecable. Sin embargo, los gnocchi que pedí estaban un poco insípidos, aunque el sabor en general era muy rico. En general, disfruté mucho de mi experiencia en el restaurante y volvería a visitarlo en el futuro.
Estaba todo buenísimo, calidad precio perfecto para ser el barrio en el que está. Italiano muy recomendable. Desde la pasta hasta la pizza, eso sí, la tarta de queso con Nutella no la recomiendo porque le ponen mermelada no recuerdo cuál fue pero era muy ácida.
Italiano decorado con mucho encanto. El personal muy amable y todos los que nos atendieron eran italianos, dice mucho del sitio. De entrante pedimos el carpaccio que no era muy destacable. Las pizzas, estilo napolitano, si estaban de 10.
Restaurante ubicado en el centro de Sevilla, en una zona muy transitada por turistas, se trata de un restaurante italiano especializado en pastas y pizzas, yo no soy muy de pasta, pero las pizzas me encantan, y tuvimos la curiosidad de probarlas en un sitio con tradición en comida italiana. El lugar es encantador, cuenta con una estética muy atractiva, donde impera un gusto maravilloso por la decoración e iluminación, consiguiendo un ambiente muy íntimo y acogedor. El servicio de camareros fue estupendo, nos atendieron muy bien, fueron muy serviciales y atentos. Y en cuanto a la calidad- precio de la comida...me esperaba algo más, por ejemplo las pizzas las vi un poco escasas en ingredientes, y la verdad que para los precios que tienen podían estirarse un poco más y meterle un poco más de condumio, aún así, estaban bastante buenas y la masa muy diferente de las pizzas convencionales, y esto lo digo para bien. En general, es un buen restaurante para probar algún que otro plato italiano, y disfrutar de una velada gastronómica mediterránea.
Buen lugar para comer pasta. Bastante buena. Algunos detalles de atención de alguien del personal que no nos gustó, que quedó eclipsada por el buen trato del camarero. Precio excesivo para algo tan simple como una botella de medio litro de agua 3€, pero correcto para el resto de las cosas que pedimos y vimos. La lasaña muy buena, aunque un poco quemada en algunos puntos. Los tortello al pomodoro muy ricos. Las raciones nos parecieron correctas en tamaño, ni mucho ni poco. Los postres en la línea, el coulant me pareció industrial, tipo mercadona. La tarta de queso y Nutella sin estar espectacular me sorprendió, más que por el sabor de la tarta, por la salsa que la acompañaba. Me pareció muy buena.
Ha sido todo un grato descubrimiento. Almorzamos pasta fresca y estaba muy rica, además el vino que nos propusieron también tenía un estupendo paladar. Es muy recomendable!!!
Buen servicio. Nos atendió un camarero simpático italiano. Buen servicio, decoración exquisita y buena comida. Pedimos pasta fresca lasagna all' emiliana muy rica y ensalada capresse . Otro plato muy rico de pasta fresca es Tagliatelle al tartufo. De postre .. tiramisú y cannolo siciliano, hojaldre frito relleno de queso ricotta con piel de naranja y chocolate.
Después de visitar otro del grupo GMI que nos encantó teníamos ganas de seguir probando otros restaurantes del mismo. Somos muy amantes de la pizza con pistacho y vimos que aquí lo tenían en formato pasta, así que nos decidimos a probar esto. Pedimos en primer lugar el Paccheri con Crema de Burrata, Pistacho y gambas. Lo mejor de la comida. La pasta perfectamente al dente, la salsa de Burrata muy rica, las gambas muy ricas aunque no encontramos el sabor a pistacho, solo estaba espolvoreado por encima y escaso. La ración poco abundante, se agradecería alguna pieza más de pasta y gambas. Pedimos también el Calzone Cotto e Funghi y al cortarlo a la mitad vimos que venía totalmente vacío, solo por el centro tenía queso dejando en los extremos, alrededor de un 40% de la pizza sin queso, solo había un par de piezas de champiñón en ellos. Lo dijimos y, con mala gana, nos dijeron de hacerlo de nuevo con más queso. Preferimos cambiarlo por otra pizza y nos pusieron una de Queso de Cabra y Jamón. Esta segunda se queso de cabra y jamón estaba muy buena, era muy ligera y los bordes muy aireados, aún así, tenemos mejor recuerdo de la masa de otro restaurante del mismo grupo. Después de esto pedimos los postres. Un coulant de chocolate con helado de vainilla. El coulant se les pasó un poco de cocción y tenía muy poco líquido dentro. El helado parecía industrial o al menos no a la altura de un buen gelato italiano, estaba un poco cristalizado. El otro postre ha sido el Cannolo Siciliano, relleno de ricotta, una mitad con naranja y otra con pistacho. Las dos muy buenas pero la parte de pistacho totalmente increíble, lo que más nos ha gustado junto a la pasta. No es el mejor el mejor italiano en el que hemos estado pero no es mala opción. Recomendable totalmente la pasta.
Comida italiana auténtica y muy rico todos los platos. El ambiente es muy bien y está muy bien decorado. Merece la pena ir a comer.Comida: 5/5
Se trata de un restaurante acogedor con una cuidadosa decoración. Disponen de una carta con variedad de entrantes, ensaladas, pizzas y pasta. Nos decantamos por los parpadelle con ragú de conejo y setas chantarela, los cuales estaban perfectamente cocidos, pero nos resultaron algo insípidos. Sería recomendable que hicieran un guiso con el conejo y las setas para potenciar el sabor de la pasta. El problema es que la pasta no estaba ligada al ragout por ser tan escaso y eso hacía que a la pasta le faltara sabor. Y teniendo en cuenta el precio que tiene la pasta 17,40 € esperas que el plato esté de 10. Nos pareció también excesivamente cara el agua que nos sirvieron 3 € por una botella de medio litro. Por otro lado, nos pedimos la pizza cuatro estaciones, la cual tenía una masa napolitana muy conseguida y de alta calidad. Los ingredientes eran también de primera y el precio era algo más asequible con una mejor relación calidad-precio 12,90 €.