La Mordida de Belén

Atención correcta, lugar limpio, la comida está bastante buena aunque algunos platos un poco escaso la cantidad/precio como los alambres o nachos al pastor. Los nachos muy ricos. Precio un poco elevado en relación a la cantidad. Lugar agradable y bien decorado. Tiene un par de escalones para entrar al local. Es el de la calle belen

Hasta hoy, la mejor Mordida a la que hemos ido. Estaba toda la comida muy sabrosa y jugosa. Cochinita y pastor con queso, no pueden faltar como recomendación. La atención por parte de las dos personas que había en ese momento en sala, fue inmejorable. Lo único malo es que no se puede ir en coche, pero la zona en la que se encuentra está fenomenal.

¡La decoración es asombrosa! Muy hermoso todo. Las tortillas las trajeron de trigo. Luego el camarero nos ha dicho que "se pueden pedir de maíz". Lo considero buen dato. La comida nos ha parecido bien y el servicio también.

El local es auténtico y colorido, desde luego un pedacito de México. Las camareras muy amables y serviciales. muy sonrientes. Asi da gusto. La comida deliciosa. La única pega es que nos pusieron la sopa en último lugar y queda como raro. Hubiéramos proferido el orden inverso. Por lo demás todo muy rico.

Unos platos muy ricos. Los nachos me han gustado mucho. Probamos otros platos también y todo riquísimo. La decoración muy bien, paredes y mesas con frases y dibujos. El personal muy atento y además nos ayudó a elegir y que no pidiéramos comida de más. Recomendado 100%.Comida: 5/5

Las estrellas son por la atención al cliente que fue maravillosa, el chico que nos atendió fue sin duda lo mejor de la noche. La margarita de mango estuvo riquísima, la comida aunque tenía buena pinta no estaba para nada buena, estaba sosa, desabrida, la carne estaba chiclosa como vieja, las flautas desabrida también, el adorno de frijoles con nachos tenía más sabor que el resto. Para mí ha bajado mucho la calidad. Tienen mucho que mejorar.

Fuimos para canjear una caja regalo de la marca Smartbox. Nos incluía dos bebidas a elegir entraba cerveza, Modelo por ejemplo, media ración de nachos nos sorprendió para bien el tamaño y fajitas a elegir entre pollo, ternera o mixto con 4 tortas por persona. Los nachos estaban buenísimos, bien cargados de queso y un guacamole con algo de pico de gallo. Las fajitas fueron más reguleras. Estaban bien cocinadas pero les faltaba un punto de sabor, tanto a la ternera como al pollo. El servicio bien, agradables aunque un poco despistados con el tema de cobrar con el cupón. Tardaron un rato en decirnos que todo estaba ok y que nos podíamos ir, tras tener que acercarnos nosotros a preguntarles a la barra.

El sitio es precioso y el trato de los camareros ha sido insuperable! Y por supuesto la comida súper deliciosa! Lo que me gusta de este sitio al cual ya he ido muchas veces y en otras ubicaciones, es que cuando entras parece que viajas a México! El colorido de las paredes y mobiliario es genial! Pedimos 3 platos de medias raciones para compartir y una quesadilla por cabeza! estaba todo delicioso! De beber dos jarras de margarita, una clásica y otra de fresa, nos gustó más la clásica pero la de fresa estaba buenísima. Pedimos media de nachos que vienen con guacamole, queso, pico de gallo y frijoles, media de queso fundido con cochinita pibil, quesadilla mixta de jamón y champiñónuna por cabeza, y media de queso con pollo chipotle! De postre una crepe de chocolate y cajetadulce de leche acompañado de una bola de helado de vainilla! De verdad todo buenísimo! 100% recomendado! Quería destacar la atención de los camareros ya que nos indicaron perfectamente qué pedir y qué cantidades para que no sobrase nada y probásemos varias cositas!

Una maravilla por todos los rincones. La comida fabulosa, riquísimo todo. Sirven muy rápido, y eso que tenían la sala llena. Los precios muy acorde a la calidad de la comida. Y los camareros todos encantadores.

No está mal pero nada del otro mundo. Tenía una reserva por el tenedor que me la cancelaron cuando llegamos y ya estábamos sentados no teniendo los puntos pertinentes. Aparte cuando llegamos había un señor en silla de ruedas y el local no está adaptado y no podía entrar porque tiene 2 escaleras con la silla de ruedas. La tabla que tenían para que subiera era como una broma y menos mal que le ayudamos a subir porque se habría matado. La comida nada del otro mundo. Me dejó algo indiferente. El servicio muy amable.