La Oca

Comento mi experiencia en Restaurante la Oca. Domingo por la mañana llego sin reserva a eso de las una y cuarto hay gente en cola, la mayoría somos de dos y sale una chica muy agradable preguntando a los que esperábamos si éramos para comer de dos entra y al instante sale y empezamos a entrar calculo que ocho parejas nos dan mesa hacemos el pedido nos sirven en seguida, comimos muy bien y salimos muy satisfechos. El precio para lo que comimos estuvo bien y el servicio del personal inmejorable conté como nueve personas atendiendo en el interior una mas en la fabulosa barbacoa y otro chico, una chica más a cargo de los pollos para llevar, o sea una organización inmejorable para la gente que entraba y salía. Eso si en domingo como yo fui no se sirve café. Yo recomiendo y repito

Hace años que tanto mi familia como yo somos clientes asiduos y destacar la amabilidad del personal para procurarte una mesa , si hay que hacer cola para entrar puesto que siempre está a tope ; pero la gestión es rápida y eso se valora. Respecto a la comida muy buena relación calidad/precio y cualquier plato de la carta es apetecible , yo en particular ; destaco el pollo , bien tostado que aún así te comes la piel del pollo y ; las croquetas que están de muerte. Un 10 por todo y para todos los que ahí colaboran en la atención al cliente.

Pollo espectacular!! Muy tierno y jugoso. Pedimos menú, el gazpacho sabe a crema de mantequilla. Los postres muy justos. Gran detalle por su parte de cambiarnos el gazpacho por otro plato. El servicio atento. Recomiendo ir a comer la especialidad de la casa que es pollo con patatas.

La comida está muy bien y a pesar de la cola que puede haber fuera, la gestión es rápida. La chica que está controlando la cola en todo momento se mostró muy amable. La puntuación se debe a algún comentario del camarero, quizás no demasiado apropiado y algo fuera de lugar. Como plus, también hay la opción take away.

La comida estaba sabrosa y la atención rápida. Nosotros fuimos con mesa reservada y así lo recomiendo. Destaco los canelones. Fuimos a primera hora de abertura de la cocina, queríamos alcachofas a la brasa como indicaba en la carta, lo pedimos y encontré inaceptable que luego no tuvieran.Comida: 4/5

Nos encantó, la comida estupenda servicio perfecto por parte de los camareros en especial el señor PICARELLI, volveremos sin duda Acceso para sillas de ruedas: Muy amables ya que ibamos con un niño en silla de ruedas y nos lo pusieron muy fácil

Tenía ciertas dudas de cómo sería, ya que había mucha cola pero pasamos rápido Me pedí unas costillas y de lo bueno que estaban no les pude subir una foto "en condiciones" un lugar ¡excelente! Nota: los camareros muy atentos, uno me dijo gracias mi rey y me sentí acogido.

Siempre que voy a Stiges paso por ahí, pero la última vez que fui la atención por parte de un camarero que me imagino que por sus años ya está harto de trabajar a tal punto que tuvieron que venir sus compañeros a calmarlo. Nos equivocamos y en vez de pedir botella de agua pedimos, una Coca-cola le dijimos si podía cambiarla y su respuesta fue “QUE PENSÁRAMOS BIEN ANTES DE PEDIR”… Pondré la foto del camarero. El pollo sigue siendo igual de rico pero, cada vez más pequeño.

Fuimos por calçots, estaba y la ración justo lo necesario para llenarte y decir que genial y no puedo más. Pero al comentar que no como ni carne, ni pescado me pareció recibir trato diferente. Lo que no era bonito que a mi compañero le trajeron chupito y a mi ni me pregunto. Ya sé que no caigo bien a la gente, pero no tanto, he Y, sí, hay olor fuerte a la carne. Para la próxima preferiría otro sitio.

Excelente relación calidad/precio. Cocina casera y tradicional. Raciones generosas, y muy buena atención por parte de un gran equipo de camareros atentos y profesionales. Conclusiones a las que uno llega cuando hace más de 30 años que frecuenta este local , emblemático y de referencia en pleno centro de Sitges. Gracias.