Pez Tortilla

No está mal, pero hay sitios mejores. Llegamos a este bar atraídos por las reseñas. El bar es ultrapequeño y siempre está lleno de gente, con lo que tienes que esperar, normalmente no hay sitio para comer y todas las mesas son de pie. No hay servicio a mesa, tienes que pedir en barra y recogerlo. Las croquetas están deliciosas. El problema vino con las tortillas. A mi me encanta la tortilla cruda, pero hay una diferencia entre cruda y que sea una piscina de huevo crudo sin sabor. Probamos varias opciones, como la de trufa con jamón y la verdad es que el sabor es bastante flojo. No es un sitio caro, pero creo que hay sitios mejores para comerte una buena tortilla en la zona.

Un poco decepción. Tenía ilusión por conocer este sitio con tanta fama y mucho peor de lo esperado . Sin el relleno vuestra tortilla no tendría absolutamente nada. Una tortilla buena sola ya tiene que estar buena; a partir de ahí, acompañarla al gusto. En mi ciudad, Santander, hay decenas de sitios mucho mejores. Puede sonar prepotente pero la que hago yo en mi casa también está mucho más rica. Las camareras encantadoras. Unas chicas muy agradables y atentas. Foto 1.Mi tortilla en mi casa. A la vista ya se aprecia la diferencia Foto 2. Vuestra tortilla. No lo hemos acabado. Seca y mal. Foto 3. Vuestra tortilla. Poco hecha es la parte más positiva.

Que buena la tortilla clásica! Súper jugosa por dentro, buen tamaño el "pincho" creo que es 1/4 de tortilla y a €3.50 pedimos también una porción de 8 croquetas por €9.50 y probamos las de jamón, puchero de la abuela, y calamares en su tinta. Las croquetas muy cremosas y sabrosas a la vez, el de calamar en su tinta sabe a calamar y son negritas por dentro. Bebidas a €2.20-2.80. El servicio bien y rápido, informal, comimos en barra.

Pasamos por ahí a tomar un pincho de tortilla porque estábamos haciendo una ruta de tortillas de patata por Madrid. Es un lugar al que ya había acudido anteriormente y me gusta bastante la variedad y la calidad de las tortillas que preparan, recomendado también probar las croquetas y si sois fan de las cervezas artesanas igual. Como única pega que el restaurante es un poco caos para encontrar sitio donde sentarse y para pedir, pero por lo demás genial.

Le pongo 4 estrellas porque me lo esperaba mejor ya que me habían hablado muy bien de sus tortillas e íbamos con las expectativas demasiado altas creo. Tienen una gran variedad de cervezas tanto nacionales como internacionales con las que puedes acompañar los pinchos. Pedimos una clásica con cebolla y otra de morcilla con pimientos que me sorprendió porque estaba muy buena. Volveremos a darle otra oportunidad más adelante.

Las tortillas están cruditas y van cambiando los sabores, el pincho cuesta 3,5€ y el dúo croquetas 2,8€, vienen dos. Pedi la tortilla de morcilla de burgos y pimiento caramelizado y la de patatas con cebollas, ambas deliciosas. Las croquetas de pucheros son increíbles. Otra veces he tomados las croquetas de chipirones y están muy buenas, al igual que la tortilla con queso de cabra y cebolla caramelizada. Como pega, no te dejan juntar dos mesas pesar de estar libres y hay pocas sillas.

Vinimos a comer unos pintxos de tortilla aquí a la hora de la comida. Pedimos cuatro tipos diferentes, a cada cual más bueno. Mis favoritos sin duda fueron el de morcilla con pimientos y la tortilla clásica. También pedimos la de albahaca y tomate seco y la de trufa y brie. Todas muy muy ricas y a un buen precio. El pincho era grande y viene acompañado con dos rebanadas de pan. Para volver y probar nuevas tortillas que seguro que también están espectaculares.

Uno de los sitios que más me ha gustado de Madrid. Probamos la de trufa con algunas dudas, y al final pasó a ser nuestra tortilla favorita con diferencia. La tortilla clásica sabe bastante a cebolla, y puedo entender que a mucha gente no le termine de gustar. A mi también me gustó muchísimo. Por otro lado, la de tomate y albahaca también es muy recomendable. El servicio fue muy muy atentos y rápidos.

Tuvimos suerte de llegar cuando había muy poca cola. Es un lugar que se nota que está de moda, porque la afluencia de gente era flipante, por momentos agobiante, aunque merece la pena. El ambiente es agradable con música fuerte. El personal super amable y muy rápidas, nos atendieron con una gran sonrisa en la cara! Pedimos diferentes raciones de tortilla y croquetas variadas, junto con copas de vino u cerveza. Totalmente recomendable para probar tortilla jugosa y original! Tienen gran variedad de cervezas artesanales.

Es un sitio al que hay que ir si o si en Madrid. Las mejores tortillas que he provado en mi vida sobretodo la clásica. Aunque la de morcilla y la de parmesano también estaban muy buenas. En mi opinión la tortilla de brie y trufa tenía demasiado sabor a trufa. Volveremos seguro!