Reseñas
Pequeño restaurante muy acogedor, con una buena atención y bonita decoración. El ambiente es muy agradable y es perfecto para comer tapas y platillos. La presentación es buena y la calidad de la comida también.Comida: 5/5
Local acogedor, personal agradable. Carta variada, todo lo que comimos y lo que vimos en otras mesas tenía una pinta exquisita. Las croquetas de chipirones deliciosas, los tacos también. Gastamos 19,25 x persona bebiendo agua y sin postre. Se necesitan mínimo dos platitos x persona si no tienes mucha hambre.
Es un lugar muy bonito. La comida está buenísima. La calidad de la comida y los sabores son espectaculares. Recomiendo las croquetas, la tortilla recién hecha. El pa amb tomaquet la cazuela de cordero y las costillas de cerdo.
Es una muy buena opción si quieres degustar un poquito de la cocina mediterránea sin excederte en cantidades. Escogimos el menú degustación por 24 euros y la verdad es que no nos quedamos para nada con hambre. Todo estaba muy rico y la tarta de queso increíble.
Gran eleccion, sin duda vale la pena una visita, la calidad del producto de primera, los platos bien elaborados y el servicio muy correcto
El sitio es bonito y ambiente agradable La atención fantástica! Buenos platos, para unas tapitas y copas muy rico! Recomendado
Fuimos un grupo grande y nos pusieron en un reservado arriba estupendamente. El menú fue más que correcto para el precio, incluso sobró algo de comida. Todo muy rico, variado y con muy buena predisposición a cambiar a las personas del grupo que no podían comer algo al ser vegetariana. Estuvimos muy agusto. Muy bienComida: 5/5
Un sitio íntimo con una calidad de comida espectacular y sobretodo muy original! Hemos pedido 7 platos a compartir entre 4 más 2 postres y todos estaban buenísimos!
Acogedor y cálido, me fijé en cómo cuidan los detalles luz, mobiliario, vajilla, decoración. Te sientes cómoda inmediatamente. El servicio es joven, rápido y educado. La carta está escrita en la pared, combina ingredientes de huerta y granja con una elaboración accesible pero sorprendente. La fórmula es muy sencilla: platillos servidos en pizarra, fáciles de compartir, de forma que puedes probar varios sin sentir que te estás pasando. Todo delicioso y original. Me gustó especialmente el tartar y las costillas de cerdo Ral d'Avinyó, que se deshacen en la boca.
Local acogedor con buena decoración y comida correcta. Probamos tortilla de butifarra estaba rica pero poco sabor a butifarra, gambas rebozadas ricas, las croquetas estaban ricas pero poco sabor, berenjenas rebozadas con lima nos encantaron, el toque de la lima se nota y es perfecto, cerdo rebozado en tiras, tarta de limón y crumble de manzana correcto. Si estás por la zona es un buen sitio para tapear