Restaurante Figon de Momo

Un lugar tranquilo para tomar unas tapas todo lo que pedimos la verdad que buenísimo,la atención muy buena camareros simpáticos y atentos,y muy buena ubicación!

De los mejores bocadillos de beicon queso que hemos comido. El pan recién hecho y el beicon tostaito. Lo remate con un carajillo de ron "un cremaet" de los mejores. Y la señora Marcela muy amable y simpática.

Hemos estado para comer y nos han atendido muy bien. Es la comida que esperas en un sitio así. Comida normal de calidad. Hamburguesas, sandwich y demás. La bebida se puede rellenar las veces que quieras. Si buscas un sito de grandes cantidades y calidad normal es tu sitio. En la terraza aunque corría el aire hacia calor. Algo que deberían mejorar.

Sitio tranquilo y se agradece con esto del covid. Además todo muy limpio,los baños también y con gel en la entrada. Pedimos unas tiras de pollo y pan con tomate y alioli y riquísimo. Buena relación calidad precio. Volveremos

Miramos en la web y pensamos que era el restaurante brutus,pero no lo es,es un bar con buen servicio de comidas y cenas pero no comida gigante como sale en la web la carta,camareros agradables, buen servicio a pesar de la decepción de que fuera el brutus de comida gigante que no lo era Admisión de niños: Fui con 3 niños pequeños y comida para ellos,nugets,huesos,San Jacobs etc...

Fuimos a desayunar, las tostadas con tomate muy buenas y trato muy amable. Volveremos.

A pesar de que estaban a punto de cerrar, nos dieron de cenar,el trato de la dueña de diez y los bocadillos y tapas buenísimos. Nos veremos en verano! Muchas Graciass

Comida rápida, sin más. Las cartas son llamativas, y la comida muy justa, poco cuidada. El pan de los bocadillos no es de calidad, las hamburguesas son poco atractivas, y las patatas las típicas congeladas que son desagradables. El sitio está bien ubicado, pero no creo que volvamos.

Un lugar muy especial maravillosos aperitivos un trato familiar súper recomendable toda la carta es de comida casera y los dueños son encantadores Marcela es atenta servicial y te hace sentir en tu propia casa sin duda muy muy recomendables no puedes irte de Oropesa sin pasarte por aquí no te arrepentirás

Bar de pueblo costero levantino al q no volver jamás, puesto q le indicas al camarero q vas a cenar, te toma nota bebida y comida, sirve inmediatamente la bebida y a los 40- 45 minutos le preguntas x la comida y q te vas, ruega esperes un momento pues ya sale de cocina, a los 10 minutos siguientes vuelve y alega q aún no está en cocina, entretanto una familia de 4 miembros en mesa al lado cenaron x etapas dos miembros atendidos y otros dos 20 minutos después. NO PISARemos jamás.