Reseñas
Pedimos la carta y nos comentaron que no tenían carta para enseñarnos. Nos pusieron una caña y un tercio de botellín sin gluten con un plato de ensaladilla por 16,20€... Por falta de personal tuve que pagar en barra.
Precio desorbitado para la calidad y cantidad de comida. Pedimos dos copas de albariño, nos pusieron la botella abierta en la mesa, sin saber si ya estaba abierta de antes y nos la cobraron integra.
El sitio cambió de nombre, ahora se llama combarro. La carta tiene muy pocos platos ademas de cara y encima no hay de la mitad, pedi carne y estaba cruda por dentro, cuando me la trayeron de vuelta estaba fria. Los camareros casi no existen. Le pedimos una sombrilla que esta al lado y parece que se rien de nosotros. No vuelvo alli
Mala experiencia, estuvimos un día de partido y nos salió todo mal. El camarero no nos atendía y nos vimos obligados a levantarnos e ir a pedir a la barra cada vez que queríamos comer o beber. No tenían ni carta ni QR en las mesas, así que cuando nos trajeron la cuenta nos llevamos la última guanta en la cara. Ni volveremos ni lo recomiendo...
Este sitio deja mucho que desear... Fui hace 3 semanas y fue completamente decepcionante. Simplemente el hecho de que no tengan carta deja mucho que desear, al menos eso nos dijeron los camareros, que no tenían ni código QR ni carta física... Cosa que creo que no sea legal. Después te llevas la sorpresa de que te sangran 9 euros por una ración de ensaladilla... En fin... Definitivamente no volveré a pisar nunca más este sitio.
Al camarero lo tienes que buscar tu en vez de él a ti. Hoy estuvimos comiendo y nos recomendaron fritura de pescaíto, hicimos caso a la recomendación. Nos lo trajeron y el rebozado se despegaba fácilmente del pescado, totalmente insípido y cobrando solo por ello 30€. Si tenéis hambre o sed sale a cuenta esperar en otro sitio o entrar a un supermercado.
Gran sitio para comer pescaito frito y tomarse unas cervezas o un rico y frío vino blanco! Nos encantó el sitio tanto por el trato como por todo lo que pedimos!!
Mala experiencia Tardaron una hora en decirnos que se le había acabado el plato que pedimos, después de reclamarlo 3 veces. Para pedir algo o te levantabas o no iban a la mesa. Veo excesivo el precio de la comida, un plato de arroz normal con gambas que no llega a ser media nos cobraron 20€. Ni carta física ni QR para poder saber precios o comida. Encima le comunicamos que nos pusieron más cervezas de las tomamos y ni la quitó, diciéndonos que no le faltáramos el respeto. No recomendado, no volveré.
No hay carta, no hay precios expuestos, lo cual es ilegal responsabilidad nuestra no exigirlo y te cobran un dineral por una comida muy común. Coincido con otras reseñas que te aumentan el número de consumiciones. Se salvan por los días de partido... NO REPETIREMOS!!!
Ya han despedido por fin al camarero alcohólico, pero se ha dado de baja el gran cocinero y resulta que cocina una persona que no sabe nada de cocina, hoy nos han puesto un pulpo a la gallega según ellos, caliente, chicloso, mal cocinado en definitiva, con muy malísima presentación y nos han cobrado una pasta, 18 € , después hemos pedido choco a la plancha, que no había visto la plancha ni de lejos osea, crudo y con la misma salsa que el pulpo anterior...se lo he dado a mi perro, por lo menos alguien lo disfruta. Es una verdadera vergüenza que no tengan un cocinero/a de verdad para sustitución para los precios que cobran, se ríen de los clientes y por supuesto no te presentan la carta que es ilegal y te llevas el susto sin poder reclamar nada. Un negocio que engaña al cliente presumiendo de ser un buen restaurante. Ni idea de lo que es la buena y auténtica restauración. Sólo le doy mérito al camarero que es muy profesional y atento, aunque creo que pasa vergüenza. NO LO RECOMIENDO LUEGO REPERCUTE EN TU SALUD. NO ME SENTÓ BIEN TANTO PIMENTÓN PARA TAPAR QUE NO SABÍA COCINAR, TIRANDO DE ESPECIAS. SI VUELVO ES PORQUE HA VUELTO EL COCINERO. ESTOY POR PEDIR LOS PAPELES DE MANIPULADOR DE ALIMENTOS. ES QUE HA SIDO TREMENDO.