Reseñas
Muy buenos pinchos, los de bacalao con salsa de cal¢ots y el de sepia son de mis favoritos desde ya. Personal muy amable.
Muy buen lugar. Excelentes las patatas bravas!
Fui a un encuentro de couchsurfing. Era día de tapas a 1€. Aunque la composición de las tapas es algo extraña yo tendí a separar algunos componentes la cantidad es realmente abundante. Diría que merece la pena y mucho. El chico que atendía muy educado y servicial. Un buen local, sin duda.
Un lugar para disfrutar de muy buenas tapas; me gustó porque al ser un lugar pequeño y tener una imagen de restaurante, no es el típico lugar de tapas que tienes que comer de pie y hay mucha gente; puedes sentarte en la barra o alguna mesa pequeña. Está a muy buen precio y se come muy bien, son tapas de calidad. Puedes llegar en metro ya que está al lado del Molino, justo en la calle que está al costado izquierdo del Molino.
Leo las reseñas y parece que haya estado en otro lugar... probamos sólo los pinchos, y se notaba que llevaban bastante tiempo hechos... el pan estaba o duro o correoso... una compañera cogió un mini perrito caliente y el pan estaba como una piedra. Quizá si pides tapas y están recién hechas la cosa cambie, porque la comida no estaba mal de sabor, pero tampoco creo que vuelva. Además, el local tiene un ambiente de barrio que se cargaron completamente poniendo reggeton y música discotequera chunga eran las 22h, tampoco era de madrugada.
La verdad es que lo encontramos por casualidad. Teníamos pensado ir de pinchos por Blai, pero ya eran las 22h y todos los bares estaban llenos. Seguimos andando a ver si encontrábamos otro sitio y al verlo nos llamó la atención. El local es más para ir a cenar de tapas y sentarte en una mesa, pero si quieres puedes sentarte en la barra y degustar sus pinchos, que van de 1€ a 2€, y eso es lo que hicimos. Hay mucha variedad de pinchos, quizá no tantos como algunos sitios de Blai, pero la verdad es que están exquisitos. A parte que es un sitio muy tranquilo y limpio. Otro día volveremos a probar las tapas!!
Tapas a 1€ , variadas pero dentro de lo habitual. El menú exagerado de precio. Hay que ir pronto por que se llena muy rápido. El personal muy amable. Llegamos aquí guiados por el maps, un lugar, a mi parecer, sobre valorado.
Entramos para pedir unos chupitos y nos cobraron 4€ por cada uno... ¡¡¡8€ Por dos chupitos!!! Nuestra sorpresa fue cuando preguntamos la marca del cafe licor y nos dijeron con tono burlesco que era de la casa. Muy desacertado por su parte.
Restaurante de tapas y pinchos a precios asequibles. A diferencia de los que hay en la calle Blai, no es tan "de batalla", no suele estar tan concurrido y puedes comer con más tranquilidad. También puedes pedir platillos y postres a la carta.
Muy decepcionado en su visita entre semana. Lo recordaba como un buen restaurante hace 2 años, pero no me quedan ningunas ganas de repetir. Pedimos una flor de carbassó con brandada de bacalao, croquetas de foie y de codido, y pintxos en barra. Muy mediocres. Ha cambiado mucho respecto a lo que recordaba.