Reseñas
Es un obligado si te gusta el vino. Tiene una carta de casi 200 vinos. La comida es buena, tabla de quesos abundantes y el Rabo de buey con frutos rojos exquisito. Atención inmejorable.
Ambiente agradable. Disponen de terraza. La comida está rica y el tamaño de los platos es bastante grande. El servicio muy amable y atento
Uno de mis imprescindibles cuando visito Granada. Buenos vinos, ambiente tranquilo, para charlar mientras saboreas el vino elegido, y lo acompañas de tapitas agradables. El personal es educado y entendido en vinos. Volveré.
Sitio bueno buen ambiente buena atención y muy buena comida. Pedimos tabla de quesos y foia muy bueno pulpo a la brasa muy bueno y lomo bajo ahumado de ternera gallega con crema de cacahuete y foia
Una pequeña gema, un rincón de muy buen gusto. Muy buenos vinos y una oferta gastronómica de calidad. Tiran muy bien la cerveza aunque yo prefiero la embotellada.
Uno de los grandes clásicos de Granada. Un sitio al que ir para disfrutar de un buen vino en un ambiente con encanto, tranquilo y familiar. Copean una grandísima cantidad de vinos. Las tostas están muy ricas y aunque aún no tienen pan sin gluten, te ofrecen alternativas para que una persona celiaca pueda comer.
Muy buen bar y restaurante para tomar algo y comer bien. El establecimiento está en pleno casco antiguo de Granada y tiene un tamaño muy reducido, por lo que suele ser bastante difícil encontrar mesa libre, aunque también dispone de mesas en la calle. La comida y las tapas que allí ponen están bastante bien. Las veces que he ido me han puesto tapas como tostada de queso brie con mermelada, tartaletas rellenas, embutidos, o incluso muslos de pato confitados, que jamás en ningún otro bar me los han puesto y estaban riquísimos. Dispone de una carta amplia y variada, aunque cuando yo he ido con mi grupo amigos solemos pedir “salaíllas”, que son una especie de bocadillo en el que el pan es una salaílla pan salado al que se le añaden otros ingredientes… está muy bueno. En general esta todo muy bien y el servicio es bueno. Muy recomendable.
Magnífica carta de vinos. Estupendas tapas y raciones. Atención y asesoramiento personal.
La atención es tan desagradable que todo lo demás pierde su valor. La carta de vinos es muy buena y por ello decidimos ir a cenar, después de haber estado en 2 ocasiones tomando un vino. En las veces anteriores no habíamos sido muy bien tratados, quizá precisamente por no haber pedido nada de la carta. En la tercera vez, llegamos y saludamos con cordialidad al camarero con pelo recogido que atiende las mesas. No hay respuesta alguna. Esperamos dentro y en la zona de terraza por si queda algún sitio libre. Junto a nosotros y sin nada que hacer, no nos dirige la palabra en ningún momento. Decidimos marcharnos. Tiene muy buenas reseñas, serán de aquellos que han logrado ser atendidos. ¿Tanto cuesta saludar, informar sobre la disponibilidad de mesas o dejarnos buena sensación para volver? Debe ser que no lo necesitan. No volveremos.
Me encanta !! Muy buen trato por parte del servicio, gran variedad en vinos y los aperitivos exquisitos. La música y en ambiente TOP