Reseñas
Excelente trato el ofrecido por Andrés. El ambiente es familiar. Llegamos temprano para cenar y justo después todas las mesas se llenaron y comenzó la espera para el resto de clientes Andrés te invita a una bebida con su tapa un queso con su toque de ajito, perejil y buen aceite mientras una mesa queda libre.un acierto si lo que buscas es un buen pescaito frito y buenas tapas. Precio medio pero de sabor excelente. Volveremos seguro. Acceso para sillas de ruedas: Tienes mesas con espacio para incluir una silla de ruedas o carrito de niños/ bebés
No está mal pero la verdad que nada que ver con el pescaito frito del sur. Eso si, el personal muy amable y simpático
Es un sitio con mucho encanto, lo conozco hace más de 20 años, y jamás me he llevado una decepción. Lo recomiendo al 100% sobre todo si quieres tomar unas cañas y tapear. El precio es muy razonable y el trato es esquisito.
Muy rica su comida y bien fría la bebida!! Jeje muy linda la música!! Me gusta
Un sitio que no falla. Atendido por Andrés su dueño que siempre se preocupa por tener muy buena materia prima. No os puedo recomendar nada porque está todo muy bien. El adobo, los flamenquines, el salmorejo con berenjena, la fritura entre otros son lo más destacado.
Un lugar pequeño pero muy agradable y una atención muy buenaComida: 5/5
Pues decir q toda la comida está riquísima, gran variedad d raciones y este bar es un ejemplo para ver q con poca gente trabajando pero con ganas de hacerlo, te atienden de lujo.. Su comida, su atención y sus productos merecen la pena, yo volveré en cuanto pueda, recomendadisimoComida: 5/5
La comida excelente, el trato inmejorable y los precios adecuados. Los platos son abundantes y están muy bien cocinados y en su punto. Me encanto y volveré sin lugar a dudas. La única pega es el cierre de la cocina a las 16h, pero la vida no es perfecta
La esencia de este lugar es Andrés, profesional, amable, educado y sobre todo atento. Producto muy muy aceptable, bien trabajado en la mini cocina. Lugar para disfrutar.
No puedo hablar mal del servicio, que fue más que correcto y muy amable. La comida sin más, los cubiertos y copa no estaban lo limpios q se podía esperar, caos en el interior con una barra llena de platos sin recoger q llamaban a gritos a una mano más para aliviar el follón de trabajo. Siempre está lleno así que a lo mejor no era nuestro día