Reseñas
Si te gusta la cocina vasca es una opción excelente. En el barrio de Chamberí te encuentras este restaurante con unos platos muy ricos. Eso sí, su precio ronda los 35 euros por persona aprox. Puedo recomendarte lo que pedimos: Txangurro al horno al estilo bilbaíno que estaba de muerte o la tortilla de bacalao con puerro de Beasain que estaba de fábula. Para el postre escogimos el pan viejo sobre crema de toffee y helado. Hummm exquisito.
Curiosamente, y como no podía ser menos, Luis Martín ha vuelto a sorprenderme, y para bien, trayendo a Madrid otro trocito del Norte. Cuando me comentaron que en la madrileña calle de San Bernardo se orillaba la llamada Taberna Bakio me pregunté: ¿de San Bernardo puede salir algo bueno? Como si se tratara del río Estepona, que riega el valle donde se asienta Bakio, esta calle también ha fructificado con el paso del tiempo. El ambiente es perfecto: la madera va vistiendo la piedra en pinceladas cálidas, con la luz al dente y el suelo al anticucho, con el color de la tinta del país. Nada más sentarme la cerveza y el pincho de salmón, con la piparra, la oliva abrazada por un lomito de anchoa, el boquerón al vinagre y el pepinillo agridulce; acompañado por una cremosa ensaladilla.
Buen ambiente. Camareros muy agradables y buena calidad de alimentos. La carne a la piedra excelente. Como recomendación pedirla poco echa para disfrutar de todo el sabor
Hemos comido comido hoy. La verdad es que es tranquilo y el ambiente es agradable. Un poco de calor, éramos muchos. Los entrantes buenos, recomiendo las setas, son muy buenas. Pedimos carne, bien hecha y presentación correcta. Los postres, aceptables. Lugar recomendable.
ESPECTACULAR! La reforma de este sitio , buena comida y el nuevo espacio está muy chulo, un lugar al que hay que venir y disfrutar de la buena atención y cocina. Recomendado las croquetas entre otras cosas.
Buenos precios con una gran carta de vino. Buenos precios en el vino también. Cocina muy interesante. Buen ambiente y excelente trato
El local está genial. Buen sitio para comer y beber. Muy bien trató.
He comido hoy alli con 20 personas y todo muy bien. Nos han preparado una mesa amplia y el servicio ha sido muy ágil. Hemos comido un menú por 34 euros con bebidas y postres incluidos. Con 4 entrantes y chuletón o pescado. La carne muy buena, las setas también. Lo único que me ha gustado menos es el pastel de cabracho. Muy buena relación calidad / precio.
La comida estaba buenísima y en cantidades muy abundantes. El camarero, muy atento, nos recomendó unos berberechos y estaban increlíbles. El bacalao al pilpil estaba buenísimo también. Los precios son muy razonables. Lo único malo es que tienen carne a la piedra, y sin varias mesas cercanas se la piden, la sala se llena de humo y es un poco incómodo. Tienen ventiladores para eso, pero hasta que se va el humo pasas un rato incómodo.
El dueño de este restaurante es un moroso no le paga a sus empleados dice que luego o que ha quedado sin dinero y nuca te paga . Nota: la vida te lo cobrará.