Casa Lucas

Todo lo que comimos, riquísimo. El mejor rabo de toro que hemos probado, pero todo, todo, todo, estaba increible. Eso sí, hay que reservar, es un sitio chiquitito y se pone hasta los topes no me sorprende. Calidad-precio genial! Visita asegurada la próxima vez que volvamos.

REQUETEBUENO TODO. Paseando por la calle decidimos tomar algo en la barra, gran acierto! Las carrilleras me parecieron estelares, a años luz de las que tan de moda están en los restaurantes madrileños. El canelón muy especial y distinto. Tengo que volver a probar toda la carta!

Madrid y Alella: una delicia. Sitio acogedor con un trato muy bueno. Con la cerveza una tapa. No busques refrescos, solo hay cerveza, agua y algún zumo. Cada vez que voy a Madrid es sitio obligatorio.

Sitio típico de Madrid con una comida y trato del personal espectacular. Te recomiendo: 1. la ensalada de tomate con queso de cabra y albahaca y orégano. 2. Calamares en su tinta se lo pedía todo el mundo. 3. Rabo de toro con una base de puré el más bueno que he probado en mi vida. Aunque está tan rico que se hace un poco corta la ración que ponen. Debería ser algo mayor. 4. Canelón negro relleno de verdures, gambas y toque de curry. Se recomienda reservar un día antes porque es un local pequeño y siempre está lleno. Clica en "útil" y hazme saber si esta reseña te ha servido. ¡A disfrutar!

Comida muy rica y elaborada. Pedimos unos pinchos frios de pastel de espinacas y puerro, unos pinchos calientes de pollo con sona y mouse de maiz y por último el canelon de marisco con verdura al curry. Todo estaba buenísimo!!Comida: 5/5

Estuvimos ayer cenando allí y la sensación con la que salimos fue de engaño total... Haciendo caso a las opiniones y puntuación nos dejamos guiar y llevar... Sorpresa cuando entramos y al ver la carta la variedad no era mucha y muy a nuestro pesar los precios eran bastante elevados. Aún así, y siendo conscientes de la zona de Madrid en la que estábamos y porque no nos quedó otra debido a la alta demanda en otros sitios nos quedamos y asumimos el precio de tener que pagar como "guiris". Pedimos un par de raciones. Una de ellas croquetas mixtas... 6 tristes croqueta congeladas 9€ ... Pedimos la ración de rabo de toro, sinceramente, muy rico, pero fueron 21€ cuatro trozos minúsculos... Conclusión: 35€ dos personas, dos raciones y dos copas de vino... Un auténtico robo. No volveremos, los precios para lo que ofrecen son abusivos. Lo único bueno, el trato de los camareros, en especial que nos atendió que fue muy amable y atento.

En la foto, pincho de alilla, absolutamente delicioso. He probado también los calamares con Ali Oli y tinta y el arroz cremoso, increíbles!! También los meseros super atentos y amables. En serio uno de los mejores restaurantes, de probar si estas en Madrid unos días.

Las cañas bien tiradas, la comida muy buena, la carta de vinos es estupenda. Se nota que los dueños llevan muchos años de experiencia. No son unos recién llegados, saben bien lo que hacen. Por cierto, los nuevos camareros son un encanto también. Llevo yendo allí no se cuántos años. Y me alegro que hayan superado el cierre covid

Entramos por casualidad al ver hueco en la barra, pero un gran acierto. Servicio muy bueno, atento y profesional. Las tapas rozando la excelencia, por lo que repetiremos seguro pero en mesa y tirando de carta.

Uno de los rincones más acogedores de Madrid, donde se pueden degustar ricas tapas y ricos vinos. Siempre nos atienden con una sonrisa. Muy céntrico y recomendable.Comida: 5/5