Reseñas
La primera cañita que tomé en mi recorridos andalusos fue acá, no tengo palabras para explicar la buena onda del local y de su gente, solamente os digo que cada véz que vuelvo para Sevilla me voy payà para volver en el clima sevillano. La camarera, los clientes, las mascotas, la comida casera.. todo parece estar ahí por compartir. Autentico
No se puede tener más arte... mariscos de Huelva... van todas las semanas por la gambas blancas, cocina tradicional y los dueños son pa matarse... cuando puedo voy a comer y disfrutar del ambiente
Lugar emblemático en el corazón del centro de Sevilla. Junto a plaza de armas. Principio de torneo. Terraza extraordinaria. De los pocos veladores q da el sol, durante más tiempo. Ideal, para ir con reuniones de amigos, en fa8 o sólo. Hay tapas, raciones, pescado frito, marisco de Huelva. Trato muy ameno. El dueño se llama Molí..es cercano, profesional y un fuera de serie. Después de la primera cerveza, ya te sientes como en tú casa. Lo recomiendo altamente
Buen trato. Terraza estupenda. Pescaíto fresco. Limpio..gran variedad de tapas.Atencion inmejorable.. Recomiendo 100 x 100
El bar estupendo. Limpio atento baratito y encima la camarera un encanto. No hay manera de aburrirse allí . Vaya arte tiene!!!!!!
Un lugar donde tomarte unas cervezas frías con buena compañia. Y si no tienes buena compañía no importa, porque la camarera te alegra el día.
Excelente atención. Muy deliciosa comida. Y grandes porciones. Me encantó, volvería a ir
El peor sitio de Sevilla. El camarero muy prepotente y agresivo. No paraba de discutir con la camarera su mujer y pegaba voces y portazos delante de los clientes. Cuando le pedimos que nos tomara nota nos habló de muy malas maneras incluso dió un golpe a un vaso y lo rompió contra la mesa. Por no hablar de la limpieza del local, el lugar perfecto para el recreo de las cucarachas. Un inspector de sanidad tendría que echar horas extras.
La comida está bien, pero el servicio es pésimo. Se olvidaron completamente de uno de los comensales a pesar de haber reclamado su comida en varias ocasiones. Después de mucho insistir, la sirvieron más de media hora después de que los demás hubiéramos terminado de comer sin un solo gesto de disculpa. Un desastre de comida familiar. El camarero que atiende fuera es más o menos amable, pero el de la barra es muy desagradable y maleducado. No volveremos, desde luego.
Auténtico lugar 5 estrellas Michelín. Porque tenía la entrada para ir a ver al Valencia a la Cartuja sino me quedo ahí metido a pasar el fin de semana. Género de primera ,muy buena fusión me hice de la fritura cojonuda q preparan regada con Güiskinaranja. El camarero un tío más majo q las pesetas y la clientela gente VIP. Nos volveremos a ver ! . Saludos al bético camionero