Reseñas
Habíamos pasado muchas veces por este local, y fue la primera vez que entramos. Experiencia bastante positiva. Llegamos un poco tarde, pero todavía estaba la cocina abierta y pudimos cenar: pedimos unas patatas bravas y unas lágrimas de pollo con mostaza dulce, todo casero y con muy buen sabor. Precio quizá un poco elevado para la cantidad en este segundo plato. Buena atención, camarero muy cercano. Volveremos.
Yo destacaría la amabilidad de los camareros que me atendieron. Tomé el menú del día: revuelto de ajetes estaba bueno, y secreto encebollado este plato no me gustó mucho, el secreto estaba bueno y en su punto, pero la cebolla absorbe grasa y eso hacía que estuviera un poco grasiento. De postre me tomé puding, muy bueno; su textura es muy cremosa.
Bar acojedor para desayunar, comer o picar algo. Es una gran opción para desayunar los días de rastro. Las tostadas con tomate riquísimas. En mi caso añadí huevo a la plancha y genial. Hay opciones varias de desayunos: tostadas, churros, bollería y brunchs. El pincho de tortilla nos pareció espectacular tanto que se nos olvidó hacer foto. Camareros muy amables. La chica que nos atendió súper atenta y con ganas de ayudar. Repetiremos para desayunos y probar más cosas. Además muy bien de precio.
Muy buen trato del personal, buena relacion calidad y precioComida: 5/5
Comida casera muy bien elaborada. Tiene una carta muy variada y completa. También ofrecen menú del día con cuatro primeros y cuatro segundos, que incluye pan, bebida, postre y café, en día de diario 12 € y durante el fin de semana 18 €. Servicio rápido y muy amables. El precio está fenomenal. Lo recomiendo, volveremos sin dudarlo.
Las gyozas que pedimos no estaban muy allá y el plato de lagarto estaba bastante bien de cantidad, pedimos media ración y, para dos, de sobra para cenar. Buena atención, muy amables.Comida: 3/5
Solo estuve en una mesa en el exterior tomando un gintonic, pero el trato fue agradable y el precio correcto. El baño estaba limpio.
Un sitio súper agradable. Los camareros son muy simpáticos y además es un local dog friendly! Hemos ido con nuestra perrita y nos han tratado genial. La comida buenísima, al igual que las tapitas que ponen con la cerveza. Muy muy recomendable!
Bar amplio con un comedor y una terraza que son 3 o 4 mesitas en una acera estrecha con coches pasando... El camarero muy simpático... Pedimos para tomar algo en terraza y nos pusieron una tapa de salchipapas con pimientos verdes, de tamaño pequeño. La sorpresa cuando pedimos la cuenta, 3,1€ el doble de Amstel?? Me parece un robo y no volveremos.
Espacio perfecto para despertar los sentidos, sobre todo el del gusto: talento en los fogones.Comida: 5/5