Reseñas
Estaba lleno. Fuimos sin reserva y nos dieron mesa a los 10min. Pedimos Croquetas de espinacas, q están muy buenas. Canelón que para mi gusto faltaba algo de verdura. La tortilla en su punto. Me recordó a las q se hacen con las patatas de bolsa. Viene poco cuajada. Y el postre, tarta de queso, muy rica.
Recomendable 100%. Aunque el local, de primeras, no atraiga la atención, la comida y el servicio de este restaurante es increíble. Nosotros pedimos croquetas, ensalada de burrata, berenjenas con miel, tortilla de patata, tartar de atún, canelón de pollo y para terminar la tarta de queso. Todo riquísimo, destacaría la ensalada de burrata, las croquetas de espinacas y la tortilla de patata. Importante dejar un hueco para el postre y probar la tarta de queso. Volveré sin duda!
Muy bien. La costillas de Hoison no fallan, espectaculares. La gyozas de chipirones en su tinta muy buenas, y la tarta de lima tan bien rica, parecida a una tarta de queso, pero con merengue de lima. Volveré una tercera vez a probar la tortilla y tarta de queso.
Recomendable. Un sitio que la experiencia va de menos a más. Por fuera el local no llama la atención. Todavía tiene el nombre del antiguo negocio. Una vez dentro, la atención de primer orden. La carta es pequeña pero variada, con muchos contrastes. La presentación cuidada y comida muy buena. El precio no es barato pero es acordé a la calidad que ofrece. Pagamos entre 20€ y 30€ por persona. Una excelente opción en Lavapiés.
Muy buen trato y una comida casi inmejorable. No probamos nada que no fuese de nuestro agrado y todo eran cantidades contundentes y de una muy buena calidad. Recomiendo la tortilla, los torreznos y las costillas.
Le pondría 2 estrellas y media pero no se puede. Pedimos la milhojas con sardina, el salmón y la costilla. Teníamos muchas expectativas y no se cumplieron en cuanto a sabor, todo muy soso, y simple. La milhoja para 2 traía una sola sardina, una sola, para 2 personas. Como si en España la sardina fuera un artículo de lujo. Encima, con todo esto te cobran los vinos también a precio de lujo cuando no lo son. La cuenta fueron casi 70€ por una cena mediocre, no repetiría ni lo recomiendo. Hay muchos sitios en Madrid en los que comes muy, muy bien por ese precio.
Un restaurante acogedor, con bastante espacio entre mesas y buena música para poder charlar sin problemas. Pese a que los precios son algo elevados y las raciones no son muy grandes, la comida es deliciosa. A la gyosas les falta carácter, no así a las croquetas de jamón ibérico y las albóndigas que fue una ración que sorprendió. El toque oriental es bien aprovechado en La Falda
Todo espectacular. Muy simpaticos y atentos y la comida un 11 sobre 10.Comida: 5/5
Hemos entrado por causalidad y ¡vaya joya! El servicio realmente amable pero es que la comida es otro nivel. Nos decantamos por la tortilla imprescindible, las costillas que se deshacen en la boca y una ensalada de burrata y membrillo. Las tartas de queso y lima, caseras y para morirse. En serio. Volveré pronto a probar el resto de la carta, no tengo dudas.
Llevamos muchos años iendo a la Falda , y su hermana la Lorenza, y se han convertido en nuestros restaurantes de cabecera en Lavapies. El trato es siempre bueno, la comida espectacular! Un lugar siempre genial para cuando tienes visitas o un jueves no te apetece cocinar pero quieres darte un pequeño capricho.Comida: 5/5