Reseñas
Buen sitio para comer, el local está decorado de forma muy tradicional, tiene un ambiente muy tranquilo, iluminación tenue me ha parecido muy bonito y acogedor, buena música, el personal es muy atento. Felicitaciones para el personal de cocina, el calçots esta muy bueno, lo recomiendo 100x 100.
Una joya de la cocina catalana en medio de Gràcia. Hay una amplia variedad de productos que se pueden elegir tanto en el menú como en la carta. Los precios son competitivos y el trato al cliente rs excelente. Y es suficientemente amplio para que nunca esté masificadoComida: 5/5
Un lugar muy tranquilo, la comida excelente y los camareros muy atentos. Muy buenas las croquetas caseras de calçots, sobre todo la salsa romesco!
Sitio estupendo para hacer una buena comida. Camarero muy educado y súper majo, cocina hacen los paltos muy sabrosos y el estilo del lugar fenomenal volveremos
Hice una reserva por teléfono para cenar el jueves 6 de abril. Era uno de los únicos sitios a los que les quedaban calçots. Es un local muy chulo y original y el personal muy atento y agradable. La cena fue espectacular: los calçots eran abundantes y estaban riquísimos junto a su salsita, además pedimos pan con tomate y butifarra con judías, también estaban de muerte. Además nos trajeron alioli CASERO para la butifarra, era algo sobrenatural, super cremosa y suave. Acabamos comiendola a cucharadas. Genial experiencia, volvería segurísimo.
Es un sitio encantador, con aires antiguos, barilles y muchos espejos en las paredes, la comida fue deliciosa, tienen menú y muy buenas sugerencias. Las porciones están bien.Comida: 5/5
Menú del día más que correcto por 13'50€. El trato muy cercano y agradable y el entorno muy relajante. El flan me pareció brutal.
Lo primero que he de decir es la camarera que nos atendió fue un verdadero encanto, más maja imposible. Nos explicó como se comían los famosos calçots, ya que era la primera vez que los probábamos y la verdad que estaban tremendos con esa salsa romescu, además la presentación en una teja me pareció muy guay. De segundo pedí abanico de ibérico que estaba riquisimo, con una guarnición de una especie de frijolitos pequeños con un aliño y especias, patatas y alcachofas a la brasa, todo super bueno. Ah y de postre una crema catalana casera, que ha sido la más rica que he comido en mi vida. Si vuelvo a Barcelona será el primer sitio al que vuelva a comer!
Hemos cenado menú calçotada y la verdad es que súper bien. Todo muy rico, servicio amable y rápido. La única pega es que me gusta más la crema catalana templada en lugar de fría, pero por lo demás todo genial, recomiendo :Platos recomendados
Buscando un lugar donde comer calçots nos recomendaron este restaurante, y la verdad que fue todo un acierto, el servicio muy amable y el ambiente muy bueno Comida: 5/5